Resumen y sinopsis de El fin del imperio de John Scalzi
La física rige nuestro universo. Es imposible viajar a una velocidad mayor que la de la luz… Hasta que se produce el descubrimiento del Flujo, un campo extradimensional que se encuentra en ciertos puntos del espacio-tiempo y que puede transportarnos a planetas de otros sistemas solares.
A través del Flujo, la humanidad se expande a nuevos planetas. La Tierra cae en el olvido y se erige un nuevo imperio, la Interdependencia, fundamentado en el principio de que ningún asentamiento humano puede sobrevivir sin los demás. Es una manera de evitar las guerras interestelares… y, para los gobernantes del imperio, un sistema de control.
El Flujo es eterno, pero no es estático. Cambia de la misma manera que lo hace el curso de un río. En casos excepcionales, planetas enteros han quedado aislados del resto de la humanidad. Cuando se descubre que el Flujo se mueve y que es posible que planetas humanos queden aislados para siempre, tres individuos, un científico, el capitán de una nave espacial y la emperox de la Interdependencia, emprenden una carrera contrarreloj para tratar de salvar lo que se pueda de un imperio estelar que está a punto de desmoronarse.
No suelo leer Ciencia-Ficción. La considero aburrida y complicada. Pero El fin del imperio ha sido una grata excepción. No solo está muy bien explicado, además la trama es muy adictiva consiguiendo que no seas capaz de dejar de leerlo.
John Scalzi, autor de esta portentosa obra, era un absoluto desconocido para mí. Algo que no me extraña si tenemos en cuenta el género sobre el que escribe. No obstante me parece un escritor notable que, más allá del tipo de historias que narra, posee una gran maestría con la pluma gracias a un estilo sencillo, elegante y bien desarrollado. Para ello cuenta con una prosa ágil, dinámica y muy conseguida, un lenguaje bien ejecutado aunque plagado de tecnicismos, eso sí, concisos y argumentados y unas portentosas descripciones, bien hechas y de gran colorido, que te adentran en los paisajes que retrata el autor, aunque estos sean planetas lejanos. Y luego están los magníficos personajes. Uno de los grandes aciertos del libro es contar la historia desde múltiples puntos de vista. Eso hace que el autor nos presente a una enorme variedad de personajes que tienen en común lo bien construidos que están. Da igual cuánto aparezcan o el peso que tengan en la trama. Scalzi es capaz de crear personajes ricos y complejos, llenos de matices y con una solidez y coherencia que los hacen increíblemente reales. Así que no dudas en empatizar, odiarlos o enfadarte con ellos, en cuanto comienzas la lectura.
Tal y como indica el título, el fin del imperio, nos narra el comienzo de la desintegración del Gran Imperio de la Interdependencia, un conglomerado de colonias humanas, dispersas por el universo, unidas entre sí por las corrientes del flujo, un sistema físico complejo que permite acortar viajes de años luz a meses. De repente las corrientes de flujo empiezan a moverse, amenazando con aislar grandes urbes ubicadas en planetas demasiado hostiles para garantizar la supervivencia humana a largo plazo. Alguien tiene que hacer algo. Y es en este punto cuando convergen los distintos personajes: Cardenia, la nueva Emperox, dirigente de un Imperio masificado y problemático, Marce, físico de flujo que intenta advertir a la dirigente del peligro, Kiva, hija de una poderosa familia de los Gremios (Comerciantes que se especializan en un área específica), conspiradores, rebeldes, políticos inútiles, etc. Todos ellos van contando una parte de la historia en la que abundan las mentiras, la traición, la ambición, el valor, el amor y la amistad. El fin está cerca y de ellos depende qué salvar. Poco más puedo contar sin desvelar nada fundamental. Pero sí que puedo añadir que esta historia combina la acción más trepidante con unas reflexiones de lo más entretenidas, todo ello mezclado con una gotas de humor del bueno. Es decir, que la novela es muy interesante desde el principio hasta el final. Aunque el desenlace que tiene el horrible defecto de ser abierto y dejarte con muchas ganas de leer la siguiente parte.
En suma, El fin del Imperio es un entretenido inicio de una trilogía que promete muchas horas de entretenimiento. Y eso sin atosigar al lector con jornadas maratonianas de conceptos físicos, razas extraterrestres o tramas enrevesadas que no comprenden ni su creador. Una historia bien hecha que hará las delicias tanto de los amantes del género como de aquellos que no suelen ni acercarse a él. Definitivamente después de leerlo te va a dar mucha pena que el Imperio se acabe...