Resumen y sinopsis de Mary y la serpiente de A. L. Kennedy
Mary es una niña que vive en una hermosa ciudad, donde las cometas vuelan muy alto, en una casa con un jardín que a veces es pequeño y a veces es enorme. En ese jardín conoce a Lanmo, que se convierte en su mejor amigo. Es la primera vez que Lanmo se hace amigo de una persona. Lanmo es una serpiente dorada, con unos brillantes ojos rojos, que se acurruca junto a Mary cuando se va a la cama y se posa sobre su hombro cuando va al colegio. Pero nuestra serpiente, además, tiene ciertas obligaciones desde hace muchísimos años y debe dar uso a sus afilados colmillos en otras ciudades, con otras personas. Tras estas separaciones, algunas de ellas muy largas, cuando vuelve siempre se encuentra a Mary un poco más mayor, el pavimento siempre un poco más agrietado, siempre menos cometas en el cielo. Lanmno sabe que llegará el día en que no podrá volver a visitar a Mary y se pregunta si merece la pena tener una amiga si sabes que vas a perderla.
La historia de esta peculiar amistad entre una niña y una serpiente es, a fin de cuentas, la del aprendizaje práctico de las lecciones más duras y fundamentales: en qué consisten la separación, la pérdida, la amistad, el envejecimiento, el amor. Esta fábula, tejida con un lenguaje vibrante y cargado de imaginación, muestra además un singular reverso oscuro, pero tan rico y humano que hace de Mary y la serpiente un cuento total.