Resumen y sinopsis de El mito de Cristo de Gonzalo Puente Ojea
Para comprender el perfil definitorio del mito neotestamentario de Cristo, y las argucias de su falsedad, la explicación que ofrece este breve escrito solamente exige buen sentido, respeto por las reglas que impone el sano razonamiento y la atenta lectura de los propios evangelios canónicos, en el contexto de la sencilla información que el autor suministra sobre la época y el medio ambiental en que se sitúan esos cuatro incoherentes relatos, una vez despojados de aditamentos eruditos o premisas dogmáticas. Esta lectura, exenta de los aberrantes prejuicios de la fe, pone de manifiesto una evidente contradicción irreductible entre el anuncio profético atribuido a la propia persona de Jesús de Nazaret y el sangriento e inesperado desenlace del que fue la víctima cruenta. Desde este trágico suceso, la fe fanática de unos pocos de sus seguidores comenzó la tarea de transformar radicalmente a un artesano galileo en el Hijo de Dios, consustancial y coeterno con el Padre, cuyo sacrificio redimiría un pecado original a fin de aplacar la cólera de un Dios vengativo e implacable. Esta absurda leyenda generó muy pronto una enigmática dogmática trinitaria que implicaba una doctrina sacrílega y blasfematoria del estricto monoteísmo bíblico, creando un abismo insondable entre cristianismo y judaísmo: el mito de Cristo.
Trascendente y esclarecedora obra. Con sólida documentación, abundante bibliografía y referencias de indiscutido prestigio, se expone sin concesiones la actuación de Pablo de Tarso como creador del mito de Cristo como salvador universal, y por añadidura, de las bases teológico-filosógicas de la doctrina de la iglesia católica. Concluyente y lógico, sólo con las referencias cronológicas entre las epístolas paulinas y los evangelios ya es suficiente como para demostrar su tesis; sin embargo, abundan en el libro muchos datos más. Insoslayable para los adeptos a la verdad, no recomendable para ciegos creyentes de mitos y leyendas impuestas a través de los siglos.
Puente Ojea no sostiene la inexistencia histórica de Jesús, sino que argumenta con sólidas pruebas que el "Cristo" de la religión es un mito a partir de aquel personaje histórico. Una frase define todo el libro: "Pablo de Tarso fue el verdadero arquitecto del misterio cristiano. La dogmática eclesiástica anatemiza con furor toda explicación de la génesis de la fe cristiana que concluya registrando la ruptura entre el Cristo paulino y el Jesús de la historia". Que es precisamente lo que hace brillantemente Puente Ojea.