Resumen y sinopsis de Yeruldelgger, muertos en la estepa de Ian Manook
En la inhóspita inmensidad de las estepas mongolas, una familia de nómadas realiza un macabro descubrimiento: el cuerpo de una niña de cinco años enterrada junto con su triciclo. El comisario Yeruldelgger, un tipo temperamental marcado por la tragedia y a quien su trabajo ha llevado casi al límite de la locura, observa la escena del crimen con una mezcla de perplejidad y agotamiento infinitos. Apenas cinco horas antes se encontraba en Ulán Bator, en las oficinas de una empresa china, investigando la aparición de tres cadáveres salvajemente mutilados, y ahora, por extraños motivos, su jefe lo ha apartado del caso.
Esto no significa, claro está, que un tipo como él vaya a quedarse de brazos cruzados. Empeñado en aclarar este monstruoso crimen que le revuelve las tripas, Yeruldelgger inicia una investigación paralela con la colaboración de la inspectora Oyun, una mujer intrépida, descarada y un poco enamorada de él, y de la forense Solongo, con la que el comisario mantiene una compleja relación sentimental. Poco a poco, van surgiendo vínculos inesperados entre ambos casos, y en su camino se cruzarán desde fantoches de baja estofa hasta una red de políticos y empresarios sin escrúpulos que anteponen los negocios a la vida humana. En última instancia, lo más preocupante será la corrupción policial que sostiene esa estructura diabólica, dispuesta a todo para mantener el statu quo. Así pues, desde la sombra, Yeruldelgger y su equipo se jugarán la vida para esclarecer la verdad y librar al país de una plaga que se expande por su tejido más profundo.
Ganadora de múltiples premios en Francia —entre ellos el prestigioso Premio SNCF du Polar, el Premio de las Lectoras de Elle y el Premio de los Lectores Quais du Polar/20 Minutes—,Yeruldelgger, muertos en la estepa aporta al público un ámbito geográfico exótico y desconocido, el de una Mongolia compuesta tanto por las tribus nómadas de las llanuras como por los habitantes de Ulán Bator, un nido de crimen, vicio y racismo, donde el nivel de vileza en todas las esferas convierte el trabajo policial en un desafío quijotesco.
Novela floja. La trama es bastante tópica y previsible, y algunas situaciones son inverosímiles rayando lo absurdo. Los personajes tienen muy pocos matices y son reflejo de los arquetipos de este género.
Lo mejor son las descripciones de costumbres y paisajes de un país tan alejado.
Antes de nada resaltar que aparte de la historia la ambientación en Mongolia y la descripción de sus tradiciones y cultura me ha parecido interesantísimo, pues se cansa uno de tanta novela negra ambientada en los sitios de siempre salpicada de baretos , whiskey y tabaco. Por otro lado la novela esta bastante entretenida con grandes personajes y una trama que al principio es muy enrevesada pero que al final parece sencillísima.