Resumen y sinopsis de Prométeme que serás delfín de Amelia Noguera
Una profesora de Primaria aparece asesinada en su aula, dentro de un armario y con la boca y las muñecas enrolladas en papel celo, igual que ella castigó a Sofía, una de sus alumnas. Algunas de sus amigas intentan evitar la CATÁSTROFE y deciden investigar para encontrar al culpable. ¿Quién querría ver muerta a Adela? La lista es muy larga pero muy pronto otro hecho terrible la reduce drásticamente.
A través de sus miradas inocentes pero con la aguda intuición infantil, el lector se adentrará en el mundo de Sofía, la niña hiperactiva que más odiaba a la profesora. También conocerá a su madre, una doctora desesperada que vive solo para su hija. Sin embargo, lo que descubrirá en este camino quizás habría preferido no haberlo sabido nunca.
Confusa y muy aburrida, Prométeme que serás delfín resulta desconcertante ya desde el título. Sin embargo hay que darle algún crédito. Y es que la autora es capaz de mostrar una realidad que se vive en muchas instituciones educativas que cuentan con alumnos especiales y profesores desmotivados, perezosos o poco profesionales. Lástima que esto no haga su lectura más ágil o liviana.
No conocía a Amelia Noguera, autora de este libro. Y, aunque dudo mucho que la permita volver a cruzarse en mi camino lector, debo reconocer que es una buena escritora que cuenta con un estilo de escritura claro, sencillo y equilibrado, gracias a una prosa rítmica y bien desarrollada, un lenguaje meramente funcional y unas descripciones excesivamente superficiales. Tampoco puedo decir gran cosa de los personajes. Y es que resultan vacíos e insustanciales, protagonistas incluidos, de los que sabes nada o muy poco.
Prométeme que serás delfín nos narra dos historias que convergen en una sola. Y este manido recurso literario, bien utilizado, nos garantiza horas de entretenimiento. Ese es el problema, aquí está pésimamente hecho. Pero para no liar más la cosa, empezaré diciendo que nunca conoces la identidad de los dos personajes principales. El primero es una mujer que nos narra sus vivencias escolares, el año en el que se encontraron muerta a Adela, su profesora, una mujer arrogante, malvada y mezquina, que hace la vida imposible a todos los niños a los que da clase. Nuestra pequeña protagonista junto con sus amigas se embarca en una delirante investigación para encontrar al asesino y evitar que el colegio cierre. Paralelamente a esta historia aparece la de la madre de Sofía, una de las amigas de la anterior protagonista, que tiene TDAH lo que la convierte en el centro de las burlas tanto de sus compañeros como de la propia Adela. Esta parte resulta especialmente amarga, ya que te cuenta, en primera persona, todo el sufrimiento que comporta ser padre de un niño que “no es normal”, la lucha con todo el sistema sanitario y las instituciones educativas, para garantizar que tu hijo no sea dejado de lado. Y este contraste en el ritmo y el tono entre las dos partes acaba aportando más confusión y dificulta mucho la lectura. Al final, parece ser que descubrir al asesino es algo accesorio. Y la tragedia en el desenlace es una aviso claro contra ciertas maneras de enseñar y tratar a nuestros niños. Pero también es una llamada de atención para revisar como gestionamos los centros de enseñanza y la calidad de la educación.
En definitiva, Prométeme que serás delfín es un libro que intenta tocar tantos temas que resulta un tanto banal y no profundiza más allá de lo sensacionalista o llamativo. Quizás enfocado de otra manera pudiera haber resultado más atractivo para el lector. Pero la extraña mezcla que propone ni convence ni entretiene. Y respecto al título… si yo fuera un delfín me sentiría ofendido.