Resumen y sinopsis de Sarna con gusto de César Pérez Gellida
Lastrado por los efectos nocivos que le ha dejado la obsesiva persecución de Augusto Ledesma, el pelirrojo inspector de homicidios de Valladolid, Ramiro Sancho, vuelve al Cuerpo con la esperanza de retomar las riendas de su vida anterior. Nada más lejos de la realidad.
Una adolescente ha desaparecido en el marco de las ferias patronales de la ciudad. Se trata de la hija de un importante empresario y las primeras pesquisas apuntan a que podría tratarse de un secuestro.
César Pérez Gellida aborda su novela más negra desde una óptica global con el objeto de ofrecer al lector una visión 360º sobre un delito sumamente cruel como es la privación de libertad. Y lo ejecuta de una forma tan real que compartirá la angustiosa incertidumbre de la familia, tan estremecedora que saboreará el miedo desde la oscuridad de un lugar desconocido, tan verazque se ajustará el pasamontañas para meterse en la piel del secuestrador y, como no, tan cercana que participará en el proceso de negociación e investigación en primera persona.
Recomiendo leer antes la primera trilogía “Versos, canciones y trocitos de carne”, porque aunque ahora encontramos una nueva historia, totalmente independiente, sí nos volvemos a encontrar algunos personajes de los que conviene conocer su bagaje.
El tiempo vuela, han pasado más de tres años desde que leí sus anteriores libros y he disfrutado mucho con el reencuentro con este autor que, para mí, es el mejor creador de novela negra en España. En esta ocasión una historia de un secuestro, que te atrapa rápidamente y vivirás, sufrirás, desde las distintas partes, la protagonista, la familia, la policía y los secuestradores. Además, nos introducirá una intriga paralela, la congregación de los hombres puros, que seguro desarrollará en próximas obras. Una trama intensa, estilo ágil y directo, también he disfrutado con los personajes, con ciertos toques de humor, con la música y con los refranes. Resulta una lectura entretenida. Muy recomendable.
Se trata de un buen libro policíaco, centrado en un secuestro y que te permite vivirlo desde diferentes puntos de vista de las personas involucradas. Es el primero que leo del autor y me ha gustado, no se hace nada pesado y es entretenido en todo momento.
Vuelve César a deleitarnos con una novela sobresaliente que no deja a nadie indiferente. Esperando el segundo para reencontrarme con el inspector pelirrojo nuevamente.
Mi paisano lo vuelve a bordar,100% Gellida....
Entretenido, más fácil de leer que los anteriores, parece la introducción a una nueva serie. Aunque no me ha gustado tanto como los anteriores, me ha enganchado.
Leo el nuevo libro del vallisoletano César Pérez Gellida, "Sarna con gusto", que parece ser comienzo de la nueva saga "Refranes, canciones y rastros de sangre" a pesar de que el hilo narrativo es continuación de la anterior serie "Versos, canciones y trocitos de carne". Así, tras la muerte de Augusto Ledesma, en primera persona, el protagonista se dirige al lector para, informándole de cómo conoció al autor el propio César, contarle que ha recibido la oferta de prologar la cuarta entrega de la serie policiaca mientras aprovecha para dar "mantequilla" al escritor diciendo que: emplea rigor y constancia, que se adapta al método sin tomar atajos, que se ha preocupado por todos los aspectos que son menos interesantes para el lector, que ha apostado por renunciar al golpe de efecto, que su novela está muy cerca de la perfección, que diseña perfectamente estructurada cada situación, que está resuelto de forma brillante el deterioro que sufren el secuestrador y su entorno, que es inquietante, cruda y descarnada, que destila sufrimiento y, que es necesaria y dolorosamente explícita. Después de este panegírico, sólo me queda espacio para decir que, si bien me ha gustado transitar por Bagur, las casetas regionales, los fuegos artificiales de las ferias, el Zero Café, la fábrica Helios, la calle Zúñiga, El Farolito, Aldeamayor Golf y la antigua piscina La Ponderosa, no encuentro justificación para la inserción en el texto de las Ferias de San Lorenzo, la demasía de chascarrillos y dichos populares, el desdoblamiento de personalidad de la víctima y la necesidad de dinero de Peteira, que parecen todos ellos encajados a la fuerza. A pesar de ser un libro entretenido no ha conseguido transmitirme las sensaciones de miedo de la niña, no he comprendido la manera de hablar de Peter, no me creo que en los trenes regional-exprés pueda abrirse otra cosa que una pequeña ventanilla de servicio (los uso todos los días) y me ha dolido el que el inspector de homicidios haya perdido parte de su magia y carisma. De 5,5.
Vuelve el inspector Ramiro Sancho con una historia frenética de un secuestro. El libro abarca lo que supone un caso de este tipo desde todos los puntos de vista: la víctima, la familia, la negociación, el cerco policial, la mente del secuestrador... Para lo que es la intención del libro de dar una visión panorámica de un secuestro, en el aspecto de la vivencia de la familia, las secuelas o la negociación quizá quede un poco pobre o pase de manera algo ligera. Es ese uno de los aspectos negativos que le veo. El otro el artificioso estilo en muchos momentos, abusando en reiteradas ocasiones de metáforas explicadas (o símiles) que de tanto aparecer, cansan... Creo que repetir el mismo recurso tantas veces en vez de dar un plus al libro en lo que es el estilo, se lo resta, ya que algunas llegan a parecer forzadas incluso. La historia es más simple que la de la trama de la trilogía de "versos, canciones y trocitos de carne", aunque también es cierto que faltan cosas por desarrollar que corresponden a una trama paralela que en esta entrega aparece esporádicamente pero se intuye va a ser el germen de algo más en próximas entregas. No llega al nivel de "Memento mori" (era prácticamente imposible, aparre de que ya el estilo de Pérez Gellida tras la trilogía citada ya no es novedad), pero es un libro muy entretenido, que engancha, policíaco 100% y que pese a tener 500 páginas se lee en un santiamén.