Resumen y sinopsis de La isla de Alice de Daniel Sánchez Arévalo
La protagonista es Alice Williams, una mujer de 33 años, con un hijo y embarazada de otro, que se obsesiona con descubrir por qué su marido, muerto en accidente, iba a una isla de solo 500 habitantes cerca de Marthas's Vineyard.Cuando Chris muere en un accidente de coche sospechosamente lejos de donde debía estar, la vida de su mujer, Alice, con una niña de seis años y otra en camino, se desmorona. Incapaz de asumir la pérdida y con el temor de que tal vez su relación perfecta haya sido una mentira, se obsesiona con descubrir de dónde venía Chris y qué secreto escondía. Reconstruye el último viaje de su marido con la ayuda de las cámaras de seguridad de los establecimientos por donde este había pasado, hasta llegar al epicentro del misterio: Robin Island, en Cape Cod, Massachusetts, una pequeña y, solo en apariencia, apacible isla que modificará profundamente a Alice mientras busca respuesta a la pregunta: ¿Qué hacía Chris en la isla?
La isla de Alice es un thriller, una novela intimista, un drama costumbrista con toques de humor pero, sobre todo, una historia de superación, sobre lo que es necesario hacer para seguir en pie "y superar la oscuridad que llega con la perdida de un ser querido
La isla de Alice es una de esas novelas que cuesta clasificar, y no porque su trama sea compleja o tremendamente original, sino porque el autor ha intentado crear una combinación demasiado aburrida como para llegar a enganchar al lector a través de sus más de 600 páginas.
Daniel Sánchez Arévalo es el autor de esta obra, con la que llegó a ser finalista del premio Planeta en 2015. Y, siendo sincera, creo que esta es una prueba más de que estos premios están más que pactados. Arévalo es un escritor que alcanza el nivel normal a duras penas. Cuenta con un estilo sencillo y excesivamente plano. Para ello se apoya en una prosa muy dinámica, pero con un desarrollo demasiado básico, un lenguaje funcional con algún intento de texto poético y unas descripciones que, aunque muy simples, dan el pego y sirven para hacerse una somera idea de los paisajes. Porque de explicaciones emocionales vamos más que servidos en esta novela.
Mención aparte hay que hacer de los personajes. La más detallada es la protagonista, Alice, y tampoco está demasiado bien perfilada. Todos los personajes carecen de profundidad o fuerza narrativa como para resultar mínimamente interesantes o verosímiles.
La historia que narra La isla de Alice es de una simpleza tan apabullante que me extraña que se sigan haciendo libros con tramas como esta. Pero para que comprendáis un poco mejor la situación, haré una pequeña sinopsis. Alice es una mujer casada con dos niñas en la treintena que una madrugada recibe una llamada indicándole que su marido, Chris, acaba de sufrir un accidente de tráfico. El problema es que el lugar donde ocurrió ese accidente que acaba costándole la vida a su esposo, está muy lejos de donde se supone que Chris debería estar. Tras un periodo de luto Alice empieza a obsesionarse sobre el motivo por el que Chris le ha mentido. Primero reconstruirá el viaje hasta Robin Island, una pequeña isla en la que se acabará instalando con sus hijas. En un intento desesperado por conocer qué hacía Chris en ese lugar, Alice lleva a cabo una delirante investigación en la que todo está permitido, incluso espiar a los habitantes de la isla. Y hasta aquí puedo contar. Lo que sí puedo deciros es que todo el argumento es bastante endeble e increíblemente lento. La trama principal resulta más o menos interesante. Pero el autor se desvía muy pronto contándonos las múltiples historias de los vecinos que presentan poco o ningún interés a la trama. Y eso por no hablar del final. El desenlace es francamente estúpido, predecible e irritantemente feliz.
En suma, La isla de Alice es una novela a la que le sobran muchísimas páginas para llegar a ser entretenida y en la que el autor ha intentado hacer una mezcla de géneros nefasta, que va desde el misterio hasta la transformación personal. Debido a ello tenemos una trama increíble con un personaje principal que está bastante cerca de padecer una psicopatía. Con estas características, pisar esta isla puede ser lo último que hagas. Piénsatelo bien y ahórrate el viaje al mundo de Alicia, que como el de la famosa novela de Carroll, también parece estar lleno de locura y cosas extrañas.
A favor de esta historia juega su originalidad, esa tensión que se trasmite durante su lectura hasta que se resuelve el misterio que rodea la vida de Alice a raíz de la muerte de su marido, y por último su facilidad de lectura.
En contra diría que hay situaciones poco creíbles, y que en algunos momentos Alice es un bucle en cuanto a sus decisiones, pareciendo que el argumento es algo repetitivo..
La literatura de Sánchez Arévalo me ha encantado. Sencilla y, a la vez, repleta de detalles y matices que te hacen conocer la parte más interior de los personajes.
Me enganchó desde el inicio y me fue maravillando sobre todo la conexión que se fragua durante toda la lectura de la protagonista con su hija, Olivia.
Es un libro de ficción que trata con facilidad los sentimientos más mundanos y los resuelve con ligereza, lo que facilita la empatía con Alice, el personaje principal.
La longitud del libro te permite no tener que despedirte pronto de esos personajes con los que acabas encariñándote. Se podría haber resuelto con un relato más corto pero habría perdido esa familiaridad con la que adoptas el final aunque no fuera el más esperado.
Me cuesta entender que tiene este libro para que haya sido Finalista de los Premios Planeta. Lento, aburrido, repetitivo y detallista hasta la extenuación en datos y lugares que no aportan nada. Pasada la página 10 personalmente, me han sobrado la mitad del libro.
El argumento es sumamente original: Alice recibe la llamada de su marido indicándole que va camino de casa. La siguiente llamada que recibe es del hospital donde su marido fallece como consecuencia de un accidente de tráfico. A la tragedia se añade un interrogante ¿por qué su marido le dijo que estaba en una dirección cuando fallece en una carretera opuesta a aquella? A partir de ese momento Alice inicia la búsqueda de la verdad o de la mentira que escondía su marido. Como digo la idea es muy atractiva. No obstante su desarrollo y desenlace se pierde en tramos superfluos y carentes del interés necesario.
Tiene un arranque y un final muy bueno, pero le sobran páginas. La parte central del libro se hace larguísima y vivimos una serie de situaciones absolutamente repetitivas que hacen que te canses del libro. La historia está bien, pero con 200 páginas menos de paja hubiera estado mucho mejor.
Primero voy a decir que el libro me ha atrapado desde el principio y no he podido de tragarme página tras página para saber el desenlace, eso que vaya por delante. Pero también decir que las situaciones que refleja y en las que se basa toda la acción, desde un principio me parecen poco creíbles y un poco forzadas.
Es entretenida y a la vez pesada. Es cierto que te hace querer saber que hacía el marido de Alice en la isla, pero hay muchas partes de la trama que son un poco surrealistas, y que no comento más a fondo por no desvelar la historia. Con la protagonista, pasa lo mismo, es simpática, pero las cosas que hace no son normales, ¿quién haría lo que hace ella? porque lo del principio, pase, pero una vez que llega a la isla me parece demasiado.
Respecto al final, bueno...el por qué estaba el marido de Alice en la isla me ha gustado, aunque me lo imaginaba desde casi la mitad del libro. Lo que cuenta después, una vez resuelto el misterio, no me gusto, sobraba totalmente.
De todas formas la novela esta bien, es entretenida, aunque le sobran páginas.
Me pareció un libro bastante pesado de leer, con una trama que se hace larga porque no lleva a ninguna parte y el final decepcionante, ya que esperaba que fuera más emocionante. He de reconocer que la lectura empezó bien al principio y podía haber sido una historia mejor, pero luego se fue a pique.
Me parecio una historia de lo mas forzada e inverosimil, en algunas partes un tanto pesada y que en general no me dejo un buen sabor de boca. En mi opinion, un libro prescincible