Resumen y sinopsis de Cuando estábamos vivos de Mercedes de Vega
Lucía Oriol es una joven casada cuya vida se complica el día en que acompaña a su padre al notario: tiene problemas de liquidez y quiere vender un piso de la calle Rosales a Francisco Anglada, un hombre muy acaudalado.
Así se conocen Lucía y Fran y se enamoran irremediablemente. Francisco es viudo y tiene una hija adolescente, Jimena, a la que instala en el piso de Rosales. Es una joven muy bella, pero con muy mala salud y de carácter difícil. Jimena se matricula en la Facultad de Filosofía, donde conoce a Pere, un chico de baja extracción social que la maltrata y abusa de ella pero del que no quiere separarse. Francisco intentará que Lucía ejerza una influencia positiva sobre su hija, pero, aunque entre las dos mujeres se creará un fuerte vínculo de amistad, el adulterio de Lucía y los oscuros secretos familiares de los Anglada desencadenan un torbellino de celos, venganza y traición del que no todos saldrán indemnes.
Lo único que me ha gustado de la novela es la calidad literaria. El argumento me parece incoherente y, a veces, absurdo; los personajes son contradictorios; descripción de hechos históricos muy poco ajustados a la Historia. Lo peor es que destila una ideología que justifica el golpe de estado del 36 con argumentos tergiversados. Incluso se puede apreciar un antisemitismo de fondo. Exaltación del catolicismo y condena sin matices del movimiento obrero y del estado laico. Los personajes femeninos salen muy mal parados. Casi todos son histéricas, medio locas, inestables, adúlteras, excesivamente pasionales y dependientes. En definitiva, muy inferiores en comparación con los personajes masculinos.
SorgiCuando estábamos vivos5.5
Tengo que decir que primero me leí la segunda parte de este libro Todas las familias felices, porque no sabía que tenía una primera parte, que es esta novela. A esta también le sobran bastantes páginas, y sobre todo la última parte se me ha hecho pesada, lenta y aburrida.
AlbarizCuando estábamos vivos7
Este es uno de esos libros que te alegras de no haber dejado por la mitad. Está dividido en tres partes. Aunque las dos primeras no están mal, me faltaba ritmo en la narración y no terminaba de engancharme a la historia. La tercera parte sí es mucho más dinámica y sin duda ha hecho que mi valoración suba.
carmenchuCuando estábamos vivos4
Siento decir que me ha aburrido la narración, demasiado descriptiva y hacia la mitad he perdido el interés.
PPAAAABBCuando estábamos vivos8
La historia de Lucía Oriol y su relación con Francisco Anglada y su familia es original y está muy bien tratada e hilada. Todos los personajes tienen una gran personalidad, muy diferente y muy bien narrada. Tanto desde los dos hermanos y su sobrina, hasta la Hermana Juana, la criada de los Anglada o los propios padres de Lucía.
Me ha gustado mucho y la recomiendo.
Sólo he encontrado un "pero" es demasiado larga debido a reiteraciones que son innecesarias. No es longitud de contenido -lo cual no me importaría- sino de repeticiones literarias. Hay párrafos seguidos con el mismo contenido, incluso párrafos en que para contar un dato mínimo utiliza hasta 4 renglones cambiando una sola palabra en varias frases idénticas.
Lo único que me ha gustado de la novela es la calidad literaria. El argumento me parece incoherente y, a veces, absurdo; los personajes son contradictorios; descripción de hechos históricos muy poco ajustados a la Historia. Lo peor es que destila una ideología que justifica el golpe de estado del 36 con argumentos tergiversados. Incluso se puede apreciar un antisemitismo de fondo. Exaltación del catolicismo y condena sin matices del movimiento obrero y del estado laico. Los personajes femeninos salen muy mal parados. Casi todos son histéricas, medio locas, inestables, adúlteras, excesivamente pasionales y dependientes. En definitiva, muy inferiores en comparación con los personajes masculinos.
Tengo que decir que primero me leí la segunda parte de este libro Todas las familias felices, porque no sabía que tenía una primera parte, que es esta novela. A esta también le sobran bastantes páginas, y sobre todo la última parte se me ha hecho pesada, lenta y aburrida.
Este es uno de esos libros que te alegras de no haber dejado por la mitad. Está dividido en tres partes. Aunque las dos primeras no están mal, me faltaba ritmo en la narración y no terminaba de engancharme a la historia. La tercera parte sí es mucho más dinámica y sin duda ha hecho que mi valoración suba.
Siento decir que me ha aburrido la narración, demasiado descriptiva y hacia la mitad he perdido el interés.
La historia de Lucía Oriol y su relación con Francisco Anglada y su familia es original y está muy bien tratada e hilada. Todos los personajes tienen una gran personalidad, muy diferente y muy bien narrada. Tanto desde los dos hermanos y su sobrina, hasta la Hermana Juana, la criada de los Anglada o los propios padres de Lucía.
Me ha gustado mucho y la recomiendo.
Sólo he encontrado un "pero" es demasiado larga debido a reiteraciones que son innecesarias. No es longitud de contenido -lo cual no me importaría- sino de repeticiones literarias. Hay párrafos seguidos con el mismo contenido, incluso párrafos en que para contar un dato mínimo utiliza hasta 4 renglones cambiando una sola palabra en varias frases idénticas.