Resumen y sinopsis de Lodo de Guillermo Fadanelli
¿Cómo puede un hombre razonable, con estudios, dejar-se guiar por sus pasiones? Es ésta la pregunta que se hace a sí mismo Benito Torrentera, que a sus cincuenta años abandona su apacible vida de profesor universitario para proteger a una joven criminal, Flor Eduarda. Lector de filosofía y conocedor de historia colonial, se entera, demasiado tarde, de que la razón y la erudición nunca serán suficientes para oponerse a la bestial atracción que le causa una mujer sin estudios, empleada de una tienda de autoservicio. Flor Eduarda, por su parte, se siente intrigada por este hombre pesimista, carente de sentido común y ocupado en asuntos que a nadie le importan. Ambos personajes huyen hacia Michoacán. Ella desea alejarse de la justicia; Torrentera, en cambio, desea llegar a un pueblo olvidado, Tiripetío, donde cinco siglos atrás se impartiera la primera cátedra de filosofía en América. Ni el cansado profesor ni su inesperada alumna se imaginan el desenlace, pero Torrentera presiente que, una vez más, el deseo se impondrá sobre las razones: y no le importa.
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Me gustó muchísimo. La historia refleja la necesidad del hombre por estar con otra persona, no necesariamente por amor sino costumbre, seguridad, pasión. Es una novela que atrapa de principio a fin, llegué a odiar a Benito pero la narración es muy amena y con un final bien escrito y que de cierta forma sorprende.
Que Fadanelli explicite en esta obra: "La novela para sobrevivir se ha transformado en ensayo" hace justo que "Lodo" sea su burda puesta en escena.
La otra tesis es: "los estudios no matan las pasiones". Su declaración de principios hace que se le van las costuras a "Lodo" burdamente.
No entiendo por qué la crítica es dura con las figuras del canon y no así con las de la "contracultura". Los personajes de Lodo pueden verse en cualquier película tarantinesca, pero el ambiente de la novela y las acciones de los personajes dejan ver a un autor que desconoce la realidad, que su mundo se reduce a unas cuadras de su domicilio en la colonia Escandón en el DF, al grado de considerar a Toluca un paisaje bucólico, como sucede a mitad de la novela.
De ninguna manera el "pulso narrativo" en "Lodo" es efectivo como lo marca el libro, puesto que los aforismos del personaje (espero que no del narrador) entorpecen la lectura y nuevamente, los hace burdos.
Sus referencias culturales (Revueltas) y de algunos filósofos (Wittgenstein, Eco, etc), son propios de un estudiante de Humanidades de cualquier facultad y no de un profesor de filosofía.
La cultura de Fadanelli se evidencia así muy pobre, al contrario de lo que marca el crítico de Letras Libres, sin dejar de mencionar que está llena de clichés contraculturales, frases hechas y lugares comunes literarios, que ningún lector que haya vivido la vida podrá pasar por alto.
Hay que desconfiar de un escritor capitalino que considere símbolo de provincia a ciudades como Morelia o Pachuca, que no distan a más de tres horas del DF, como lo hace Fadanelli, a menos que sirvan para denunciar lo limitado de su mundo.
Fadanelli, es sin duda, el ejemplo de que los escritores "realistas" en México desconocen la realidad, pues sólo la aprehenden de los periódicos que leen sentados en sus sillones clasemedieros. Ojalá los críticos también se subieran un día al metro, trabajaran en las fábricas o en las instituciones. Esa sería una prueba de madurez intelectual y no escudarse en una trama pseudointelectual para pretender saber lo que no saben.