Resumen y sinopsis de Las hijas de Zalman de Anouk Markovits
Como todos los grupos humanos inaccesibles para la mayoría, las comunidades jasídicas suelen generar todo tipo de especulaciones y falsas impresiones. Esta conmovedora novela, que destaca por su descarnada autenticidad —la autora se crió en el seno de una familia jasídica satmer—, abre por fin una ventana a este mundo opaco y misterioso. El relato arranca en la Europa Central anterior a la Segunda Guerra Mundial y se prolonga hasta el Brooklyn de hoy, dibujando el inevitable conflicto entre un amor puro e inalterable y una rígida tradición centenaria.Mientras un terremoto político sacude Europa, el pequeño Josef Lichtenstein es testigo del asesinato de su familia a manos de un guardia de hierro rumano. Salvado por la criada, que lo bautiza y lo hace pasar por hijo suyo, cinco años después él mismo salva a Mila, una niña judía que ha sufrido un trance similar. Así, Mila consigue llegar hasta Zalman Stern, líder de la comunidad jasídica satmer, en cuya casa crecerá, estrechamente unida a Atara, la primogénita de la familia. Pero una vez instaladas en París y alcanzada la mayoría de edad, el camino de las hermanas se bifurca. Si Atara cuestiona lo incuestionable y busca en los libros prohibidos verdades diferentes, Mila absorbe con convicción los estrictos preceptos religiosos que le inculcaron. Sin embargo, años más tarde, ya casada y viviendo en Nueva York, esa misma rigidez la empuja a tomar una decisión desesperada, que amenazará con destruir a su familia y expulsarla del único mundo que conoce.
Con esta novela Anouk Markovits hace un retrato sumamente descarnado y auténtico de las controvertidas comunidades jasídicas.
Un mundo completamente inaccesible y cerrado, en el que el fanatismo y el radicalismo religioso alcanzan un alto y apremiante grado.
Los personajes se ven atrapados por un hermetismo enfermizo que les impide la libertad de elección y que les sumerge en una obediencia ciega y sin límites.
Una saga familiar que se asfixia alocadamente entre el amor y la fe; dejando en su maltrecho camino desgarradores sentimientos de dolor y de pérdida.
Para ello la autora se vale de su propia experiencia vital, y de una prosa escueta, árida y seca, a la par que fría.
Se nota que la escritora vivió en sus propias carnes ese aluvión inalterable e intrínseco de calado sectarismo mortificado.
Interesante e instructiva.