Resumen y sinopsis de El viaje de Tanaka de David Cantero
Cuenta la leyenda que existe un lugar en Japón al que muchos ancianos van a morir y que guarda, tal vez, el secreto de la inmortalidad. Su nombre es Yonsú.
Mei Tanaka es una joven que jamás ha salido de Tokio. Vive en una enorme isla y detesta viajar. Se siente feliz con la rutina del cuidado de su madre. El mundo que existe fuera lo conoce por los libros, la radio y la televisión. Pero todo cambiará para ella cuando su madre muera y decida emprender un largo viaje con sus cenizas hasta encontrar la misteriosa aldea de Yonsú. David Cantero ha escrito una bella fábula que destila amor y optimismo y que nos enseña el poder de superación que posee todo ser humano.
Leo "El viaje de Tanaka", el tercer libro escrito por el periodista y presentador de informativos, David Cantero, quien elabora una humilde fábula japonesa (como dice en su preámbulo) en torno a la calamidad que para todo ser vivo supone envejecer, aceptar el paso del tiempo, el deterioro y la muerte. Esta novela (que, según reconoce el escritor, surge de un atasco que sufre en la elaboración de su siguiente libro) acierta en la elección del tema del abandono de los ancianos, está excelentemente documentada, presenta una correcta separación entre las historias de sus dos protagonistas -aunque con predominio de la de Mei Tanaka frente a la más atractiva de Kento Yokoto-, tiene algo de aventuras, es de lectura bastante agradable pero su narrativa no me ha emocionado ni me ha parecido profunda e inteligente, sino que la veo, más bien, dirigida al público juvenil. Sencilla y optimista, de 4.
Leo "El viaje de Tanaka", el tercer libro escrito por el periodista y presentador de informativos, David Cantero, quien elabora una humilde fábula japonesa (como dice en su preámbulo) en torno a la calamidad que para todo ser vivo supone envejecer, aceptar el paso del tiempo, el deterioro y la muerte. Esta novela (que, según reconoce el escritor, surge de un atasco que sufre en la elaboración de su siguiente libro) acierta en la elección del tema del abandono de los ancianos, está excelentemente documentada, presenta una correcta separación entre las historias de sus dos protagonistas -aunque con predominio de la de Mei Tanaka frente a la más atractiva de Kento Yokoto-, tiene algo de aventuras, es de lectura bastante agradable pero su narrativa no me ha emocionado ni me ha parecido profunda e inteligente, sino que la veo, más bien, dirigida al público juvenil. Sencilla y optimista, de 4.