Resumen y sinopsis de Seis días de diciembre de Jordi Sierra i Fabra
Antes de la Guerra Civil, Agustino Ponce, más conocido como «Lenin», ya se dedicaba a robar carteras por las calles de Barcelona, y Miquel Mascarell, inspector del cuerpo de policía de la República, le había puesto entre rejas en varias ocasiones. Tras la victoria franquista, los papeles se cambiaron, y el ex agente de la ley coincidió en la misma celda que este ladronzuelo. En diciembre de 1949, Lenin sigue dedicándose a lo mismo y aunque Mascarell ya no es policía, el ratero no duda ni un segundo en recurrir a su antiguo oponente cuando se encuentra en peligro. Como tantas otras veces, Lenin decide birlarle el maletín a un hombre con aspecto pudiente, pero dentro solo encuentra un catálogo de pinturas, una tarjeta de visita con el nombre del propietario y la llave de una habitación del hotel Ritz de Barcelona. Lenin contacta con su víctima para ofrecerle recuperar el objeto robado a cambio de una módica recompensa y quedan en verse al día siguiente. Pero todo se complica cuando este hombre no acude al lugar pactado y un cadáver aparece en el Ritz. Mascarell descubrirá que el catálogo pictórico hallado en el maletín robado pudiera haber pertenecido al propio Hitler, e intuirá que se enfrentan a unos enemigos mucho más poderosos de lo que pensaba
El que menos me ha gustado hasta ahora de la serie, ya sea por lo repetitivo de su argumento (en todos estos libros el inspector Mascarell va interrogando por Barcelona a las posibles personas que pueden ayudarle a resolver un caso), la escasa acción (únicamente hay una lucha al final) o los inconvenientes derivados de alojar a un amigo y a sus niños revoltosos en el domicilio del protagonista. La huella de la Guerra Civil apenas es perceptible en esta ocasión.
Siguiendo la línea de siempre. Muy entretenida.
Muy entretenido, una saga muy recomendable. Explica muy bien una España reciente y oscura
En la línea de las novelas protagonizadas por el inspector Mascarell: divertida, entretenida y ambientada en la Barcelona de la posguerra, con la palpable escasez y la miseria y la sombra alargada de la guerra posada como una losa sobre los hombros de los protagonistas. Esta vez el aliciente es la presencia de los Monuments Men.
Novela policíaca ambientada en la Barcelona de la posguerra. El antiguo inspector de policía republicano Mascarell es el protagonista de la misma que gira entorno a un asesinato relacionado con obras de arte robadas por los nazis. Desde mi modesto punto de vista se trata de una historia correcta aunque algo previsible y carente de mayores emociones.
No he leído los otros libros de este inspector retirado y, aunque referencias a anécdotas de novelas anteriores, ésta no depende de ellas. Muy fácil de leer y de imaginarte cómo fue esa oscura postguerra.
El tema de los cuadros robados, a pesar de estar muy de moda ahora (es lo que tiene el cine americano) me parece apasionante.