Resumen y sinopsis de La estrategia del parásito de César Mallorquí
Se oculta; no lo ves, pero siempre está ahí, observándote, vigilándote, espiando todo lo que haces y dices. Se alimenta de ti, depende de ti; por eso se esconde y te usa. Los parásitos se nutren de otros organismos sin llegar a matarlos. Existen muchos tipos, pero hay uno del que nunca has oído hablar, una clase de parásito que ni en la más terrible de las pesadillas podrías imaginarte. Es inteligente, es despiadado y posee un poder aterrador... La estrategia del parásito es un apasionante tecno-thriller donde nada resulta ser lo que parece y donde unos pocos han de enfrentarse a una amenaza aterradoramente letal. Y también es, en definitiva, una historia de amor. Una historia de amor en el infierno.
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La estrategia del parásito es uno de esos libros que han envejecido increíblemente mal, debido a que la tecnología constituye un punto vital de su trama que, por otro lado, tampoco es excesivamente innovadora o sorprendente. El único punto realmente a su favor es la de “personalizar” una historia bastante usada. Me explicaré. En este caso, el autor se vale de un individuo de lo más normal para contarnos una variante de la típica batalla entre hombre y máquina, con algunas diferencias de índole práctico.
César Mallorquí firma la autoría de esta historia. Mallorquí es un célebre escritor de literatura juvenil. Con eso ya podéis haceros una idea de qué pie cojea. Y es que estamos ante un escritor aceptable que posee un estilo simplón, pesado y ejecutado a medias, gracias a una prosa lenta, tediosa y con un desarrollo muy mejorable, un lenguaje funcional y unas descripciones bastante básicas que no ayudan al resto de la novela a crear un ambiente tipo “thriller” que tanto se supone que busca el autor. Y luego están los personajes. Decir que son penosos es quedarse muy corto. El problema de usar personajes cotidianos y meterlos en una trama tipo acción es que debes construirlos muy bien y justificar de manera excelente porque han acabado haciendo lo que hacen. En este caso, la construcción de personajes deja mucho que desear. Y eso se aplica perfectamente para el protagonista, Óscar, que a pesar de ser él quien nos narra esta historia, no consigue transmitirte absolutamente nada.
A las editoriales les encanta inventarse nuevos géneros literarios e incluir novelas en ellos de manera aleatoria. Este el caso de La estrategia del parásito, a la que han denominado “techo-thriller”. Lo cierto es que ni es una novela sobre tecnología, aunque tiene que ver con ella, y tampoco es puramente un thriller, ya que no termina de engancharte del todo. Pero, como siempre, haré una somera sinopsis para contar de qué va el tema. En este caso nuestro protagonista es Óscar, un joven estudiante de periodismo que, tras la repentina muerte de su amigo del colegio Mario, recibe un paquete con un USB y una carta misteriosa. En ella Mario le confía toda la información sobre un programa informático que ha encontrado. En principio nada raro, si no fuera porque todos los implicados con ese mismo programa han muerto o están desaparecidos. Cuando empieza a investigar, David se ve envuelto en una trampa aterradora que implica realidad virtual, grandes corporaciones informáticas y una inteligencia artificial con maliciosos planes. Y hasta aquí puedo hablar. Lo que está claro es que, pese a que el argumento de partida resulta muy interesante, la trama se diluye muy rápidamente gracias a unos personajes aburridos y con menos carisma que una alpargata en invierno, y a una falta clara de dirección de la obra. Esto se aprecia muy claramente en el final. Y es que el desenlace es terrible. Abrupto e increíblemente abierto, da la sensación de que el autor se ha aburrido de su obra y la quiere terminar de cualquier manera. Algo que termina de destrozar todo el libro.
En resumen, La estrategia del parásito era un buen intento de animar a la lectura a los más jóvenes con una historia “actual” que pudieran comprender y disfrutar. Pero un argumento que roza lo absurdo en algunos momentos, un protagonista que da mucha pena y un final que deja infinidad de cuestiones sin resolver condena a la obra a ser una decepción. Y es que está claro que la estrategia de César Mallorquí es dormir al personal. Por que si no, no me lo explico.
Libro original. Me ha gustado bastante. Sabe como captar la atención y el interés del lector. No he podido evitar hacer lo que nos pide el autor en la última página de libro.
Nuevo derroche de ingenio del autor para crear una obra trepidante, original y con muchas dosis de imaginación.
Nada es lo que parece en esta novela, y desde la primera hoja, ya no puedes dejar de leer hasta su (más que correcto) desenlace. Su único “problema” es que se hace demasiado corta. 100% recomendada.