Resumen y sinopsis de Al envejecer, los hombres lloran de Jean-Luc Seigle
Al envejecer, los hombres lloran, de Jean-Luc Seigle, es una novela de la narrativa extranjera de alto valor literario que se ha convertido en un éxito sorpresa en Francia. Una novela que han hecho crecer lectores y libreros: posee un encanto que se ha propagado gracias al boca-oído. Una obra con diferentes niveles de lectura: una historia de amor filial, una novela sobre cómo sobrevivir a las mentiras de la Historia, un canto al poder de los libros y el conocimiento... Premio RTL Lire, que conceden libreros y lectores de toda Francia, y que han ganado autores como Anna Gavalda. Jean-Luc Seigle es novelista y dramaturgo. Al envejecer, los hombres lloran es su tercera novela.
El 9 de julio de 1961 es un gran día para la familia Chassing y los habitantes del pequeño pueblo en el que vive: hoy llegará el primer televisor al pueblo, y el novedoso aparato les traerá las imágenes del hijo mayor, destinado a la guerra de Argelia. Durante el día en el que transcurre la novela, el lector se enfrenta a la muerte, el adulterio, la mentira, y a una revelación en la que la Historia, en mayúscula, se mezcla con la historia de una familia que ya no volverá a ser la misma.
Una delicia de personajes y de la forma de narrar de Jean-Luc Seigle. Cada frase te explota por dentro diciendo tanto con tan poco. Cada mirada, cada gesto, cada pensamiento. Tiene escenas realmente maravillosas. Me sobran tal vez las últimas páginas. Las agradezco por arrojarme luz sobre un episodio histórico de Francia para mí desconocido pero considero que no aportan nada a la novela. El único pero que puedo ponerle a este libro que me ha calado hondo desde la primera página. Me llevo a Albert conmigo y también a su hijo Gilles.
Me ha gustado quizás porque no sabía exactamente lo que iba a leer. Reflexión muy interesante sobre el sentimiento de derrota y el hastío por la injusticia. Es de relectura obligada.
Sensación contradictoria es la que me ha quedado después de leer la novela corta.
Por una parte he tenido empatía con algunos personajes (perdedores) y he sentido auténtica animadversión hacia otros.
La forma de contar la historia es cuanto menos original. A veces, me ha resultado incluso difícil, necesitando de una segunda relectura.
Si hubiera que buscar un punto débil, no me ha gustado el epílogo sobre la linea maginot.