Resumen y sinopsis de Niña errante. Cartas a Doris Dana de Gabriela Mistral
La devoción por Thomas Mann fue el punto de encuentro entre dos mujeres excepcionales que desarrollarían posteriormente una relación de casi una década de gran intensidad y pasión. Este extraordinario epistolario permite apreciar todos los matices de esa relación afectiva e intelectual, el poderoso vínculo que unió a la Premio Nobel chilena Gabriela Mistral con Doris Dana, su amiga, secretaria, compañera de sus últimos días y, finalmente, albacea de sus bienes literarios y materiales.
Comentarios y opiniones de Niña errante. Cartas a Doris Dana
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En Niña Errante se halla la correspondencia entre Gabriela Mistral y Doris Dana desde el 1948 hasta fines de 1956. Este libro es fruto de la difusión de los más de 40.000 documentos entre poesías, manuscritos, inéditos y fotografías que habían estado guardados durante casi 50 años. El libro sólo contiene una veintena de cartas escritas por Doris Dana y más de doscientas de Mistral.
Descubre nuevas pruebas documentales que brindan aspectos de la vida íntima de Gabriela Mistral. Permite valorar todos los matices de esa relación. Esa correspondencia empezó como una relación entre discípula y maestra que fue evolucionando con el tiempo.
Es Doris Dana quien toma la iniciativa. Le ofrece hacer de contacto para presentarle a Mann, a quien ambas admiraban. Consigue conocerla y desde entonces sólo se separaron por breves intervalos de viajes de Dana a México e Italia, hasta 1957.
Se hallan cartas dulces, con un tono protector, casi maternal, también cartas llenas de desesperación. Gabriela Mistral ruega a Doris Dana que le escriba y son recurrentes las cartas en las que Gabriela Mistral da libertad a Doris Dana. Otras en las que se aprecian celos o miedo a que su relación fuese descubierta. La correspondencia se alarga hasta poco antes de la muerte de la Nobel de Literatura.
En Niña Errante se halla la correspondencia entre Gabriela Mistral y Doris Dana desde el 1948 hasta fines de 1956. Este libro es fruto de la difusión de los más de 40.000 documentos entre poesías, manuscritos, inéditos y fotografías que habían estado guardados durante casi 50 años. El libro sólo contiene una veintena de cartas escritas por Doris Dana y más de doscientas de Mistral.
Descubre nuevas pruebas documentales que brindan aspectos de la vida íntima de Gabriela Mistral. Permite valorar todos los matices de esa relación. Esa correspondencia empezó como una relación entre discípula y maestra que fue evolucionando con el tiempo.
Es Doris Dana quien toma la iniciativa. Le ofrece hacer de contacto para presentarle a Mann, a quien ambas admiraban. Consigue conocerla y desde entonces sólo se separaron por breves intervalos de viajes de Dana a México e Italia, hasta 1957.
Se hallan cartas dulces, con un tono protector, casi maternal, también cartas llenas de desesperación. Gabriela Mistral ruega a Doris Dana que le escriba y son recurrentes las cartas en las que Gabriela Mistral da libertad a Doris Dana. Otras en las que se aprecian celos o miedo a que su relación fuese descubierta. La correspondencia se alarga hasta poco antes de la muerte de la Nobel de Literatura.