Resumen y sinopsis de La boda de Kate de Marta Rivera de la Cruz
La reposada Kate Salomon lleva una existencia tranquila y plácida en una casa de Ribanova, donde vive con otras dos amigas. Regenta una librería y ha heredado una pequeña fortuna después de la inesperada reedición de las poco exitosas novelas de su tío.A partir de ahí, la vida de Kate -y la de sus dos amigas- girará en torno a la preparación de esta boda, con la que no todo el mundo está de acuerdo... en especial la familia de Kate, que teme que Forster Smith acabe con la herencia que esperan recibir.
La atmósfera de la ciudad, el encanto de Kate y el romanticismo de una historia de amor que dura ya medio siglo harán que todos vayan olvidando sus intereses personales y colaboren en hacer de la boda de Kate Salomon un acontecimiento inolvidable.
Ligera y frívola, La boda de Kate, es una lectura agradable, de esas que sirven para aliviar la tensión tras libros más densos y pesados. Es, por tanto, una novela fácil de leer que ofrece bastante poco, más allá del puro entretenimiento.
El primer contacto que tengo con la autora, Marta Riviera de la Cruz, ha sido un tanto mediocre. Como escritora resulta correcta, con un estilo de escritura sencillo pero bastante elegante. Cuenta con una prosa depurada y sobria, un lenguaje elemental sin demasiada floritura literaria y unas descripciones aceptables. Sin embargo, ninguno de los personajes me logró gustar. Me resultaron muy fríos, superficiales y vacíos. Incluida la protagonista, Kate, que además me pareció un tanto insípida.
Con el título de La boda de Kate, uno esperaría que la historia versara en su mayor parte sobre el casamiento de la citada Kate. Nada más lejos de la verdad. Y es que la “historia” de amor de Kate y Foster la autora la despacha en las primeras 120 páginas. El resto del libro, además de hacer mucho hincapié en los preparativos de la boda, nos cuenta una historia sobre el tío de Kate, Albert Salomon, autor fracasado en vida que triunfa años después de estar muerto, y sobre uno de sus manuscritos hallado que contiene una obra inconclusa. Así pues el editor de Salomon, un biógrafo del autor, que casualmente es hijo del novio, Laura, sobrina de la novia y Ahmed, dependiente de la librería de Kate, se unen en la búsqueda de información sobre la vida del autor, para poder descubrir porque el último libro no está completo y, si es posible completar la obra. Y con una trama llena de casualidades sorprendentes, buenas intenciones y felicidad en dosis más altas de las recomendables, alcanzamos el final, un “happy ending” de categoría astronómica que resulta un tanto irritante y pesado.
En suma, La boda de Kate, es una grata lectura diseñada para dejar un buen sabor de boca. Solo busca entretener sin complicaciones, lo que la hace un gran libro para el periodo estival o cuando simplemente quieras apartar tu mente de los problemas cotidianos.
Novela de lectura fácil, sin complicaciones, con una trama sencilla, lineal, sin sobresaltos. Es una novela positiva para pasar una agradable tarde de lectura sin muchas complicaciones.
El libro narra una historia entrañable, en torno a una boda de dos septuagenarios medio siglo después de conocerse, de tantearse y de haberse perdido de vista. El escenario, cómo no, es Ribanova, la ciudad creada por Rivera de la Cruz para afincar varias de sus novelas. La boda con sus preparativos está rodeada de otras tramas, de la cual la más interesante es sin duda la de un autor de éxito inglés y su amigo ribanovano. Los personajes son un poco estereotípicos, pero no vacíos.
He hablado de esta novela con otros y he contrastado opiniones. En la novela falta intriga, los diversos desenlaces son previsibles, el lenguaje es lineal. Pero lo que el lector habitual de literatura novela echa inconscientemente de menos es algo diferente. Supongo que es la maldad. La autora describe con benevolencia incluso a los personajes más "malintencionados", como es parte de la familia de Kate. Pero a veces sienta bien leer un libro sin dureza, sin sexo, sin pesimismo.
Leo "La boda de Kate", el último libro que la escritora gallega, Marta Rivera de la Cruz, ha sacado al mercado y cuya colorista portada hace suponer un contenido más frívolo del que, en realidad, tiene. Así, la autora, con una hábil descripción de los lugares (de nuevo una imaginaria Ribanova que tanto se asemeja a su Lugo natal) y los personajes (entrañables Anna Livia y Shirley), manejando -con gran destreza en el desarrollo del argumento- un pequeño nudo, con una atrayente narrativa y una excelente intensidad, juega con soltura con el lenguaje en esta novela de final feliz acerca de la amistad, el amor y la familia, Sentido y sensibilidad en esta entretenida obra que surgió cuando una señora se acercó a la autora en el jardín botánico a preguntarle (tras relatarle una historia similar a la de la novela) su opinión acerca de volver a ver a un antiguo novio que le había escrito. Correcta, de 5,7.
No es su mejor libro y aún así tiene la capacidad de acerté disfrutar la historia y sentir sus personajes Me gustan los escritores que escriben sobre las personas normales, y ella teje los hilos de la historia a la perfección.
Como siempre en esta autora, muy bien escrito.
El título no expresa muy bien lo que narra el libro. La boda es solo un punto importante que hace que los protagonistas se reúnan y entorno a ellos gire la trama principal del libro.
Muy bueno.
El título despista, la boda es sólo la excusa para toda una historia de personajes entremezclados resolviendo un misterio. Muy bien escrita, muy positiva, da buen rollo leerla.
Me gusta mucho como escribe Marta,pero este libro no ha terminado de convencerme.La prosa es correctisima,como siempre,pero la historia no me ha atrapado en sus redes.Es ligero y ameno de leer pero no memorable como otras creaciones suyas.
Es de ese tipo de historias en las que no pasa nada, nada de nada, es solo una largar descripción de lo que piensan los personajes. No tiene intriga.
Tiene una narrativa impresionante, es de los pocos autores que realmente sabe escribir, describe sentimiento, hechos o paisajes sin aburrir al lector; todo lo contrario, enganchando al lector. Cierto que en este libro las primeras páginas se hacen un poco pesadas hasta que se entra en materia pero no por ello deja de ser una novela simpática, que atrapa al lector de tal forma que no puede dejar de leer y sonreír conforme avanza la novela. De vez en cuando hace falta leer este tipo de novelas. Magnífica escritora a la que hay que seguir.