Resumen y sinopsis de La lectora de Jade de Frédérique Deghlet
Jade, una joven periodista decepcionada por una reciente ruptura decide «secuestrar» a su abuela Jeanne para impedir que la internen en una residencia. Juntas se van a vivir al piso de Jade en París, donde emprenderán un viaje literario y emocional que les cambiará la vida para siempre. Jeanne le confesará a Jade que lleva toda la vida leyendo libros a escondidas, porque en su pueblo y en su época no estaba bien visto que las mujeres leyeran, ya que se consideraba una pérdida de tiempo.Gracias a su abuela, Jade conseguirá el valor y la confianza necesarias para volver a enamorarse de un joven y atractivo médico indio llamado Rajiv. Y Jeanne, por su parte, en sus intentos por encontrar a un editor para la novela de su nieta, conocerá a Albert, un veterano y culto editor con el que descubrirá que el amor se puede presentar a cualquier edad.
Increíblemente aburrido, La lectora de Jade, es una de esas novelas que intenta jugar con la baza de reunir a personajes intergeneracionales para compartir experiencias y sabiduría. Obviamente fracasa en el intento de forma miserable, quedando un libro con una trama insulsa y pesada que cuesta acabarse.
Desconocía a la autora de este bodrio, Frédérique Deghelt, aunque visto el resultado estoy segura que sería más feliz sin haberla conocido. Resultaría una escritora mucho más corriente, si no se empeñara en utilizar un estilo, tan rebuscado y pedante. Su prosa resulta lenta y, aunque cuenta con cierto grado de refinamiento, se hace difícil de digerir. Su lenguaje enrevesado, en ocasiones, funcional, la mayoría de las veces, pero siempre con aderezos líricos bastante pobres, y sus descripciones tan básicas que en ocasiones, resultan genéricas. Pero sus personajes son uno de los peores fallos de la novela. Básicamente tenemos a dos protagonistas muy diferentes entre si, aunque luego mágicamente acaban pareciéndose tanto que, salvo por la edad, no hay manera de diferenciarlas. Jeanne, la abuela de Jade, es pintada como la típica campesina paleta que, misteriosamente, se revela con una sabiduría y una reserva de conocimientos comparables a la de cualquier enciclopedia. Y, todo ello, lo consiguió, únicamente, con la lectura de obras clásicas, en su mayoría. Pero, por si eso fuera poco, parece albergar en su seno todas las virtudes maternales que puedan tener cabida en este mundo. Esta clase de personajes siempre me resultan inverosímiles y tediosos. Por otro lado, Jade, es una jovencita de 30 años, cuyo principal rasgo es la inestabilidad. No sabe lo que quiere y cambia de rumbo constantemente en pos de una felicidad que nunca tiene muy claro que forma tiene. Es completamente irritante.
La lectora de Jade, es un burdo intento de conseguir una historia sentimentaloide sobre la vida, la muerte y las opciones y oportunidades de la vida. Todo muy bonito en la teoría, pero que con el burdo y desastroso desarrollo de esta novela se convierte en un tormento inaguantable.
En esencia se puede resumir la trama de la siguiente manera: Jade, periodista de profesión, en un impulso decide llevarse a vivir con ella a Paris a su abuela, que tras un pequeño percance de salud, va a ser enviada a una residencia por sus hijas. Aunque en la novela se va mostrando la convivencia entre ambas mujeres (extremadamente idílica, en mi opinión), el tema principal es el libro que Jade ha escrito y, ninguna editorial quiere publicar. La abuela se ofrece a ayudar a su nieta, leyendo y tomando unas muy acertadísimas notas que ayudarán a la chica a reescribir parte del texto. Y es que la abuela resulta que tiene enormes dotes de editor (entre muchos otros talentos) aunque ella ni siquiera fuera consciente de ello. Y es entonces cuando el amor visita a nuestra pareja de mujeres, convirtiendo su vida en un pequeño caos que tendrán que solucionar. Y ya está. No hay nada más que contar. El resto son reflexiones y divagaciones filosóficas, más o menos afortunadas, sobre todo el universo que configura la vida de un ser humano: amor, vida, muerte, vejez, etc… además de haber muchísima crítica contra la sociedad moderna y el modo de vivir que tenemos en la actualidad. Y así sigue la cosa hasta el final. Lo mejor que puede decirse del desenlace es que resulta desconcertante. Pero no para bien. Desde luego es sorprendente e imprevisible. Sin embargo te deja con una sensación de pérdida de tiempo, de esfuerzo baldío.
En definitiva, La lectora de Jade, es una lectura totalmente prescindible que no ofrece nada más que una historia poco original y muy convencional. Gracias a lo poco creíbles que resultan sus personajes, a sus enormes partes llenas de pensamientos poco atractivos y a una trama que avanza a cuentagotas (cuando avanza), la lectura se hace desesperante y difícil de acabar. Mi consejo es que no perdáis el tiempo con este tipo de historias, en general, y con este libro, en particular.