Resumen y sinopsis de El hombre que dijo adiós de Anne Tyler
Aaron parece un hombre cualquiera, acomodado a la rutina del barrio donde vive, ocupado en su trabajo de editor y poco más. Sin embargo, la extravagancia humana suele agazaparse en los detalles: al acercarnos a él, descubrimos que este viudo de mediana edad tiene carácter como para llevar con desenvoltura una malformación física que arrastra desde niño, y no solo eso: puede enfrentarse a una hermana algo déspota e incluso pasear de la mano de su esposa Dorothy, muerta hace unos meses pero viva en su imaginación, tan viva que Aaron se extraña de que los demás no noten su presencia."Cualquier cosa puede asimilarse si se trocea, si se come despacio. Incluso las lecciones más complicadas de la vida hay que tomárselas a pequeños bocados. El plato lleno asusta..."Anne Tyler
Novela breve e intensa de esta gran escritora afincada en Baltimore. El personaje principal es un treintañero con deficiencias físicas que se ha quedado viudo recientemente. El libro gira entorno al "shock" y al declive que puede provocar esta situación. Tanto, que su mujer se le aparece en los sitios más insospechados, y sigue muy viva en su imaginación. Tyler escribe divinamente bien, y sabe ponernos en la piel de sus "raritos" personajes, creando un gran vínculo entre ellos y el lector. La verdad es que soy fan de esta señora, me gusta mucho su estilo, y devoro cada vez que puedo todas sus obras.
Anne Tyler es una excelente escritora a la que descubrí en la magnífica novela "Reunión en el restaurante Nostalgia". Es una autora que escribe una narrativa muy realista, que sabe retratar como nadie la vida cotidiana de los americanos de clase media que viven en la ciudad de Baltimore dónde siempre ambienta sus libros. La novela cuenta una historia sencilla, sin complicaciones y sin grandes pretensiones. Tiene pocos personajes, pero bien definidos. Con un estilo claro en el que predominan los diálogos, la trama se desarrolla a buen ritmo y sin demasiados sobresaltos. Leer a Anne Tyler siempre es un placer.