Resumen y sinopsis de La historia de mi hijo de Nadine Gordimer
Cinco vidas que luchan por la libertad. El color y la raza eran muy importantes en Sudáfrica durante el apartheid. Este libro muestra la intolerancia, el odio y el desprecio del blanco hacia el negro. Blancos que encarcelaban y torturaban a los negros que reivindicaban solamente una vida digna y que respetasen sus derechos como humanos. Obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1991.
“Este libro es realmente sobre los problemas que las formas comunes del amor plantean en un contexto determinado, en el que el amor al país está inextricablemente ligado a estos otros tipos de amor. Y por amor al país no me refiero al patriotismo fanático, sino al compromiso con la época”. Nadine Gordimer
Todo cambia para el joven Will el día en que accidentalmente se encuentra con su padre, importante y carismático líder contra el apartheid, a las puertas de un cine... de la mano de una mujer blanca.
Cuando se trata de novelar la historia reciente, las condiciones tan terriblemente singulares de un país como Sudáfrica, donde el régimen segregacionista condicionaba las vidas de unas personas que se veían abocadas a la lucha por sus libertades, esta novela no puede ser sino una novela irremediablemente política, que trata de ideas, pero sobre todo trata de seres de carne y hueso.
Aquí en concreto los protagonistas son una familia de clase media aspiracional que conforma una identidad separada de la población negra y que resulta más o menos aceptable para la minoría blanca imperante; una presencia de fondo, apenas nombrada, pero brutal. La familia, la militancia, el sexo, el amor en todas sus formas… todo ello se superpone, como también lo hacen los sentimientos difíciles, de rechazo e incomprensión adolescentes, hacia la figura paterna y su adulterio; la faceta al fin y al cabo oscura, privada, de quien ostenta un enorme prestigio y dignidad como personalidad pública contraria a la opresión. Este personaje del padre ausente, semejante a una sombra, escindido en su doble o incluso triple vida, lo tiene muy claro cuando se trata del futuro de su país, pero está atrapado sin embargo en sus propias trampas morales.
Se habla del poder represor del estado y de su aparato legal y carcelario, pero también del desmoronamiento familiar, de las fricciones internas dentro del movimiento de liberación y de su deriva ideológica incierta, con algo de desengaño y desesperanza ante ese odio que no cesa de latir en el corazón de una nación. Mujeres: una figura distante, la de la madre, sumisa y pragmática, el sostén de esposo e hijos que acabará por ser, en su aparente pasividad, la encarnación de las consecuencias lógicas del sistema, que todo lo alcanza. La hermana supone el estallido de rebeldía de las generaciones posteriores, mientras que la amante vendría a ser el activismo blanco implicado, pero que no deja de pertenecer a otras esferas.
El relato alterna la voz en primera persona del hijo, indignado ante lo que ve como traición de su padre a los suyos, la imagen del encuentro con la pareja clandestina semejante a un trauma que no deja de volver a él… con una tercera persona omnisciente cuyo sentido solamente lo entenderemos al final; no es otro que la escritura como testimonio y forma de dar sentido a las vivencias de uno, la propia forma de lucha del muchacho, igual que los demás encuentran la suya propia. Su ignorado papel en la historia, en fin, que le permite ajustar cuentas, llenar los vacíos, juzgar; condenando, perdonando, y convertirse en ese escritor que está también irremediablemente destinado a ser.
Una interesante historia de la nobel de literatura Nadine Gordimer que, en el contexto de la Sudáfrica del apartheid, nos cuenta los pormenores de la lucha política de un dirigente negro de la resistencia contra la segregación racial y las complejas relaciones que surgen en su propia familia desde el momento en que su hijo lo descubre siéndole infiel a su madre con una mujer blanca, que lucha desde una ong extranjera por los mismos ideales de igualdad y justicia para Sudáfrica que su amante. Novela entretenida y compleja que, con una profusa y densa escritura, consigue describir profundamente unos personajes inolvidables que nos llevarán a conocer mejor la extraña y absurda realidad del apartheid. Mi único "pero" es que considero que la novela abusa sistemáticamente de una descripción milimétrica de cada pensamiento surgido y palabra dicha por cada uno de los personajes, volviendo tediosa, por momentos, la espera a que fluyan los acontecimientos más cruciales de la historia y dejando poco lugar a la participación del lector como co-creador de una imagen global de los personajes. Sus 250 páginas bien podrían haber sido 180, lo que, desde mi punto de vista, habría hecho más intensa la experiencia lectora.