Resumen y sinopsis de Deja en paz al diablo de John Verdon
Un nuevo caso protagonizado por el detective David Gurney. Por el autor de Sé lo que estás pensando y No abras los ojos.
Nada es nunca lo que parece. Y menos si David Gurney está involucrado. Han pasado seis meses. David Gurney apenas ha conseguido reincorporarse a una cierta normalidad después de haberse encontrado al borde de la muerte tras resolver el caso más peligroso al que se había enfrentado. Madeleine, su esposa, está preocupada; Gurney ha sido diagnosticado con síndrome de estrés post traumático y nada parece alegrarle. Días después el ex detective recibe una llamada. Connie Clark, la periodista que creó la leyenda de Súperpoli y lo catapultó a la fama quiere pedirle ayuda. Su hija Kim está realizando un documental sobre las familias de las víctimas de un asesino en serie al que nunca atraparon, el Buen Pastor, y Connie quisiera que Gurney supervisara sus investigaciones y la guiara. En parte por aburrimiento y en parte por hacerle un favor a Connie, Gurney acepta.
Sin embargo, esto no será más que el principio. Incapaz de ponerle coto a su curiosidad y a su necesidad de resolver cada una de las incógnitas que se le presentan, David Gurney se verá arrastrado a una investigación para descubrir la verdadera identidad del asesino. Un asesino que es tan imprevisible como peligroso, un diablo al que convendría dejar en paz.
Han participado en esta ficha: Runita samucga
Buena novela de misterio, bien estructurada y bien resuelta. Sin embargo, la parte dedicada a seguir las pistas se hace un poco larga por los temas secundarios que se tocan, los cuales tienen un tratamiento excesivo. Estos son la competencia entre los distintos organismos policiales, la cerrazón de algunos de sus miembros, la marginación que sufren los mayores de edad y las cadenas de televisión dedicadas a la telebasura.
Gran novela de una nueva entrega del detective Gurney. Un caso sin resolver después de diez años, una crítica feroz a la carnaza televisiva y unos policías poniendo trabas más preocupados por su ego que por el caso.
Así se presenta la tercera parte de la saga.
Lo que menos me ha gustado, cosa que ha repetido en las dos primeras entregas ha sido la recreación del asesino en sus motivos para matar en el cara a cara con Gurney y cuando este tenía las de perder. Demasiado peliculero y poco creíble.
Tercera novela negra de este autor, con el protagonismo del policía retirado David Gurney. En la misma línea, aunque quizá sea la más floja de las tres. Sin sorpresas, ya sabes lo que vas a encontrar, una investigación con sus dosis de intriga, acción y tensión, aderezadas con la vida del protagonista y sus relaciones con su esposa, amigos y excompañeros. En este caso, además destaca el papel de la televisión y los realitys, criticando claramente su actuación en base a intereses de audiencia y económicos y despreciando los sentimientos y vida de las personas. Como la vida misma.
El mas flojo de los que leí hasta ahora. Te mantiene en suspenso pero esperaba una mejor resolución. A mi gusto, deja muchos cabos sueltos.
Tiene todo lo que le puedes pedir a una novela policíaca.
En este libro vemos al Gurney más sentimental, pero que no deja de ser una mente racional que ve detalles que a otros se les pasa por alto. Muy entretenido. A por el siguiente de la serie.
Novela bastante más floja y previsible que las anteriores. Me parece que al intentar remarcar el perfil de los personajes acaba convirtiéndolos en caricaturas de si mismos.
Más flojo que los dos anteriores, pero sigue siendo entretenido.
Después de "Sé lo que estás pensando" y "No abras los ojos", tengo que decir que esta tercera entrega no llega al nivel de sus predecesoras, pero aún así queda una buena obra, con menos acción, pero mucha tensión emocional, con más protagonismo para el hijo del detective Gurney.
Tercera parte de la saga, me ha gustado y te sigue enganchando como los dos anteriores. Aunque para mi gusto hay demasiado diálogo y no tanta acción como me gustan en este tipo de libros. Aun así esta saga me tiene enganchada y ya estoy deseando leer la cuarta parte.