Resumen y sinopsis de Elegía de Philip Roth
Philip Roth nos introduce en una historia íntima y universal sobre la pérdida, el arrepentimiento y el estoicismo.
El autor de La conjura contra América desvía ahora su atención hacia la lucha crónica de un hombre contra la mortalidad. El destino del protagonista de la novela comienza con la primera y abrumadora confrontación con la muerte en las idílicas playas de sus veranos infantiles, pasando por los problemas familiares y los logros profesionales en su edad adulta, hasta llegar a su vejez, momento en el que se siente desgarrado al comprobar el deterioro de sus contemporáneos y el suyo propio. Creativo publicitario de éxito con una agencia de publicidad en Nueva York, el protagonista es padre de dos hijos de un primer matrimonio, que lo desprecian, y de una hija de un segundo matrimonio, que lo adora, además del amado hermano de un buen hombre cuyo bienestar físico despierta en él una amarga envidia y el solitario ex marido de tres mujeres con quien ha mantenido matrimonios desastrosos. Es, por fin, alguien que acaba siendo aquello que no quería llegar a ser.
Elegía hace referencia a una obra de teatro alegórica y anónima del siglo XV, un clásico del antiguo drama inglés, cuyo tema es la evocación de la vida en la muerte.
Ha participado en esta ficha: bclaudia
No me ha gustado mucho.
Se trata del primer libro que leo de este autor, por recomendación... pero no me ha llenado. Tal vez porque no me gusta su estilo literario.
La idea del autor de que la vejez es una masacre, aunque dolorosa, me parece relativamente acertada. La vida es contemplada como "la dolorosa historia de pesar, pérdida y estoicismo, de miedo, pánico, aislamiento y terror".
Según la ley, la historia clínica no genera derechos de autor. Con esta novela, Roth nos demuestra que no es cierto. "Elegía" es un vía crucis de dolencias e intervenciones médicas, y poco más.
Si bien la decadencia de un hombre acomodado -ya sea social o física-, constituye una constante en la obra del autor (podría decirse que es el "canon rothiano"), en este caso le ha faltado el arte habitual, los personajes casi no son presentados y, en general, le falta sabor. Una temática tan negra podría haberle dado para mucho más, se queda en la superficie y es reiterativo. Escrita con el piloto automático. Le doy un cinco por ser de Roth, aunque precisamente por eso no debería hacerlo.
Narrado en tercera persona, con un estilo claro y sencillo, este libro cuenta una historia emotiva y triste, pero no trágica o cursi.
Sin embargo, no puedo dejar de verlo como la biografía de un "agonías", un tipo muy pesimista, que se centra y se recrea hasta el infinito, en todas las enfermedades que ha padecido (el protagonista parece más un catálogo de dolencias y un muestrario de operaciones que un humano) y en todos los errores que ha cometido. A veces, aparecen comentarios de los momentos "felices", pero son muy escasos y no tienen casi peso en la narración de la historia.
Pero, y siendo justa, he de decir que las descripciones sobre la vejez, la enfermedad y la soledad, aunque vistas siempre desde el punto de vista negativo, son lúcidas e inteligentes; tristes pero también muy acertadas.
Para mi, Elegía, es un libro que ha pasado por mi vida sin aportarme demasiado. Es sencillo de leer y, aunque trata temas más que espinosos, es muy entretenido, pero la visión tan pesimista del protagonista me puede.
Para mí no está entre las mejores de su producción.
Es una historia cruda y amarga sobre la decadencia y el deterioro del ser humano.
Le falta ese poco de chispa: la ironía y el sarcasmo tan característico de sus novelas anteriores.
La vida de este publicista judío que deja mucho que desear, no consiguió acaparar del todo mi atención.
Salvando mucho las distancias, se parece por temática a "La muerte de Artemio Cruz" de Carlos Fuentes.
Un libro que narra la historia de un hombre que acaba de morir, de sus aventuras, problemas con la salud y trato con las personas. Al principio me costó trabajo pillarle el puntillo, pero a medida que iba leyendo la historia va mejorando. Es el primer libro que leo de este autor y no creo que sea el último.
Un breve tratado sobre la enfermedad y la muerte, desde el punto de vista de un empresario jubilado. El relato es duro, un continuo homenaje al miedo y a la soledad, a la injusticia de los últimos días. Solo con buena prosa puede mitigarse ese regusto amargo y Roth, en parte, lo consigue. El final ya lo saben.
Un relato muy emotivo, que no cursi, sobre las reflexiones vitales de un hombre que al echar la vista atrás rememora tiempos felices, añora personas y relaciones, y reconoce también con dolor los errores cometidos.
Empieza el libro con el entierro de una persona y a partir de hay en modo regresivo nos cuenta su delicada vida y desde puntos de vista distintos sus familiares y amigos.
Me a encantado y lo leí casi del tirón pues no es largo
Me arapo desde el principio, tiene que ver con la soledad de las personas cuando llegan a la vejez, y como se llega muchas veces a esas situaciones. es recomendable.