Resumen y sinopsis de Crezco de Ben Brooks
Soy un lobo. Jasper James Wolf. Mírame. Soy precioso. Tan elegante y esbelto. Tengo un pelo estupendo. Soy bastante fuerte. Pero me hundo. Quizá estoy caminando sobre el océano. Las baldosas de la cocina son de hielo. Puedo vencerlas con mi ingenio. Un ingenio que supera al de Stephen Fry. Vamos, chicas, mirad qué ojos tengo. Podéis acariciarme si queréis. La música es limonada en mis venas. Tal vez debería teñirme el pelo de anaranjado. El pelaje. No sé cuánta fuerza tengo. Si puedo, debería evitar tocar a la gente. Eso es, sube las escaleras. Esto me gusta. Me lo estoy pasando bien. También tengo náuseas y sueños. Ocho en una escala de somnolencia del uno al diez. Yo puedo con él, pues tengo toda esa fuerza de la que he sido dotado. Gracias, sol. Mira, un baño. Hola, Abby Hall. Chsss, no deberíamos hablar. Vamos a tumbarnos aquí. En la bañera. Anda, Ben McKay está ahí. ¿Tienes vómito en los leggings? Quítatelos. Todo irá bien. Te lo prometo. Te prometeré muchas cosas. Sé que mis garras son salvajes. Tu boca es mía. Risitas. Dentro de tus ojos. Mis garras te hacen cantar. Tu canto es sugerente. ¿No brilla todo? Esto está muy bien. Hola, Abby Hall. Sí, alrededor de tus pies. Tíraselos a Ben McKey. ¡A los leones! Soy un lobo, ¿sabes? Esto debe de hacerte muy feliz. Sí, así es. Tus gemidos son un sí. Princesa. Eres mi princesa. Yo soy tu lobo. Estamos en el suelo del baño. Deberíamos dejar las garras ya, aunque le das muy bien. Vamos a correr por campos de piel. ¿Qué? No pasa nada. Soy un lobo, puedo soportar un poco de sangre. Yo tengo sangre, tú tienes sangre. Tu sangre sobre mí. Yo dentro de… Oh, esto es… Vámonos de aquí. Vamos a la cama. A la cama de mis padres. Cama de tamaño extra, extra grande. Sí, estamos sobre terciopelo. Unión. Dueto. La flauta y la trompa. Oh. Sí. Así. Gracias. Tus muslos son toboganes de agua. Un parque temático peludo. Dale al conejo. Oh. Sí. Tu sangre en las sábanas.
Antes de leer este libro, creía que la literatura juvenil no podía superarse, que había alcanzado ya su máximo culmen de putrefacción e inmundicia, pero entonces me topé con él. Crezco, de Ben Brooks, no solo es el libro más sobrevalorado de la historia, sino que encima está impregnado de un claro machismo que el autor no se molestó en ocultar, así como la gran dolencia de creatividad que posee y que hace de él el autor menos original del mundo.
En esta novela se nos presenta a un adolescente de diecisiete años que se droga, tiene sexo y... poco más. Quizás Ben Brooks no fuera consciente de que crear un personaje con carisma era gratis. Jasper, el protagonista, nos da a conocer su "peculiar" visión del mundo, que no dista demasiado de la de cualquier adolescente sin imaginación. Quizás si eres un joven estudiante de bachillerato sin ningún tipo de inquietud artística te guste este libro. Si no, quizás lo veas como un insulto a la literatura, pues entre sus páginas podemos encontrar citas tan geniales como "Me dijo de quedar en McDonald's" (lo cual no estoy seguro de si se trata de un error del/la traductor/a o si simplemente ésta/e diría: "¿Qué más dan las faltas de ortografía, si el público al que va dirigido este libro quizás con suerte tiene dos neuronas?") o párrafos enteros dedicados a la vagina de cualquier personaje femenino que aparezca en la historia.
Así, Ben Brooks consigue lanzar al mercado este manual de instrucciones, pues su prosa se asemeja más a la de un libro de inglés A1 que a la de una obra literaria como la que se supone que debería haber sido, demostrando como tantos otros que a las editoriales les da igual que adolescentes de diecisiete años defequen sobre el don de la palabra si aquello que hayan escrito en cualquier mañana resacosa vende.
Por favor, la próxima vez, vendednos algo de calidad a los adolescentes, que aunque muchos de nosotros parezcan ser un error de la naturaleza que ésta ha guardado para recordar los errores de su pasado, a tantos otros nos dan arcadas con este tipo de obras.
Ben Brooks tiene el don de narrar una buena historia y llenarla de inteligencia en cada una de sus palabras. Al acabar el libro tienes la sensación que no lo escribió cuando tenía 16 años, y eso es lo más positivo. Una novela divertida, amena que no te deja indiferente, donde se tratan temas como el sexo, o las drogas. Pero lo más interesante son las reflexiones que tiene el protagonista.
Podría ser la típica historia del adolescente que se cree el ombligo del mundo, pero aparte de eso incluye reflexiones muy interesantes desde el punto de vista del protagonista, que harán reír a más de un@ y ver mas amenas e interesantes la pequeñas cosas o situaciones del día a día.
¡Brillante este chaval, Ben Brooks!. No busques profundidad en este libro porque no la hay. Lo mejor del personaje, lo que piensa, pero no suelta por la boquita. Tiene momentos Muchachada Nui.
Muy ameno y fácil de leer. Me lo leí del tirón en un vuelo.