Resumen y sinopsis de Los Living de Martín Caparrós
Nito nace en Buenos Aires el día en que muere Juan Domingo Perón, julio del 74. Su infancia es una infancia como tantas, retorcida, inclemente, hecha de amores posibles e imposibles, aprendizajes y terrores, contra el fondo de la turbulencia historia argentina. Con Los Living, el gran escritor argentino Martín Caparrós se adentra en nuestra relación con la muerte, con los muertos y su desaparición de nuestras vidas. Una historia que va de la farsa a la tragedia y viceversa.
Las primeras 250 páginas me parecieron excelentes, casi brillantes. Hay cantidad de frases memorables y una historia íntima y simple es relatada con real maestría. El último tercio, en cambio, derivó, sin mucho sustento en mi opinión, en un relato cercano a lo surrealista, con un tono a veces deliberadamente ambiguo y en el cual me dio la impresión de que el personaje central (que además es el relator de la historia) se manejaba mucho menos a sus anchas y se hacía menos creíble, existiendo de por medio un mensaje o pseudomensaje intelectual filosófico que no me pareció del todo convincente. Novela original y diferente.
Iba para el sobresaliente hasta que entró el juego el Pastor y entonces Caparrós se nos extravió. Las primeras cien páginas, con Nito aún tan solo un embrión, son gloriosas, un ejercicio brillante entre imaginación, ironía y estilo. Su narrativa nunca abandona las cumbres de la excelencia pero, en mi opinión, la exhaustiva disquisición sobre la muerte que desarrolla en el último tercio de la novela, no carente de indudable mérito, hace que el relato pierda buena parte de su tensión.
”Los living” es una novela bastante negra que plantea el devenir de nuestros muertos. ¿Por qué ellos deben desaparecer después del fallecimiento? El protagonista, Nito, nace el día de la muerte del General Perón, en julio de 1974 y lo llaman Juan Domingo como para conjurar el hecho de que el General ya no esté y tenemos a otro Juan Domingo.
Está la descripción bastante jocosa de la infancia y adolescencia de este petisito cabezón argentino con fondo de la turbulenta historia de Argentina; Nito será confrontado tempranamente con la muerte de su padre y de su abuelo, lo que lo dejará desvalido frente a muchas cosas de la vida y se hará preguntas como: ¿cuál es nuestra relación con los muertos? ¿se puede mantener contacto con ellos? ¿siguen entre nosotros?
En la Argentina de 1970 había demasiada gente que pensaba en el futuro: estaba, por un lado, los que mantenían esa vieja confianza en el futuro que había constituido lo más granado del país, los que pensaban que el trabajo, el esfuerzo sostenido, el ahorro, el módico progreso personal los llevaría a darles a sus hijos las herramientas para superarlos. Pero estaban, por otro lado, los que imaginaban que el futuro argentino dependía de que abandonara toda semejanza con ese pasado argentino, que repudiara ese ideal de triunfo individual.