Resumen y sinopsis de Una historia escrita en sangre de José Manuel Frías
El 7 de agosto de 1913 un niño de nueve años, Manolito Sánchez, desapareció en Málaga, en las inmediaciones del cine Pascualini. Sus padres, que tenían otro hijo mayor y una niña de meses, se ganaban la vida en una caseta exterior vendiendo avellanas, cosa que apenas les permitía subsistir.Unos días más tarde, en una zona llamada “La huerta del Coto” el intenso hedor desprendido por un cuerpo en descomposición, con el rostro parcialmente consumido ya por gusanos, puso el punto final a la desesperada búsqueda…
“Crónica de un asesinato impune 1913” es el título que encabeza la primera parte del libro. Y es que aunque hubo dos detenidos, que lo fueron porque ellos mismos, fanfarroneando y con alguna copa de más, hablaron del crimen meses más tarde de los hechos mientras cenaban en una venta, resultaba evidente que habían actuado por encargo… No se investigó más, desapareció hasta la instrucción oral del juicio y sólo la profesionalidad de dos reporteros de la época, que siguieron el caso, indagaron, entrevistaron a lugareños y publicaron sus crónicas en La Unión Mercantil, además de la cobertura que sobre el tema llevó a cabo otro periódico (El Popular) han permitido investigar en la actualidad. Por supuesto, sólo se puede especular un siglo más tarde… El suicidio de un supuesto cómplice, llamado Téllez, las incomprensibles mentiras repetidas ante el juez y la policía por un niño (Miguel Sánchez Hidalgo) o el torero malagueño Rafael María Gómez Branley, enfermo de tuberculosis, son personajes que el autor rescata y que coloca en su análisis particular de un caso que conmocionó tres años después de que la muerte de otro niño (Almería, 1910) apuntara también a un asesinato por encargo, supuestamente para beber su sangre.