¿Qué ocurre cuando un asesino en serie es condenado y ejecutado y meses después comienzan a ocurrir asesinatos que siguen el mismo patrón?
El sherif Nick Morelli no estaba preparado para enfrentarse a un caso así, y pidió ayuda a Maggie O'Dell, la mejor agente de homicidios del FBI. En una carrera contrarreloj, Nick y Maggie tienen que enfrentarse a una horrible verdad: quizá un hombre había sido ejecutado por unos crímenes que no había cometido y andaba suelto un asesino que parecía la encarnación del mal.
Abusa del morbo y argumento previsible