Resumen y sinopsis de Un hombre llamado Lobo de Oliverio Coelho
En el Buenos Aires de principios de los años noventa vive Lobo junto a Estela. Acaban de tener un hijo y todo indica que tendrán el destino predecible de una familia de clase media. Un día, sin embargo, esa rutina se quiebra. Estela y su hijo Iván se marchan. Lobo renuncia a todo y contrata a un detective que a punto está de revelarse como un jugador fracasado repleto de conflictos internos y nostalgia. Una trama misteriosa de traiciones apartará a Lobo y a su excéntrico detective del rastro de Estela, y los empujará hacia el último pueblo de la pampa, donde la sociedad todavía parece regida por los códigos impunes de la dictadura. Veinte años después, Iván emprende la búsqueda de su padre tras la extraña visita de un hombre de mirada azul. Novela que entremezcla la trama policial y road novel, Un hombre llamado Lobo narra los efectos de las dos décadas más trágicas de la Argentina -los 70 y 90- en el interior de una familia, al tiempo que aborda uno de los temas universales: las difíciles relaciones de un hijo con su padre. La relación imposible de un hijo con su padre Una road novel trepidante
Es unos libros que me gustó bastante a pesar que todos los personajes son seres negativos, losers, exiliados del interior, en búsqueda de una identidad.
Pero la novela está bien escrita, bien armada y tiene un alto potencial psicoanalítico que la hace interesante.
El argumento: Silvio Lobo es un cuarentón solterón y funcionario prevaricador que vive con Dora, su madre a quien odia y que ella desprecia. El solterón se decide a dejar el domicilio materno para fundar una familia. ¿Con quién funda una familia? con una chica que conoce en un tugurio de mala muerte y a quien ni siquiera intenta conocer, pero que instala con domicilio fijo y regalías económicas. La chica que se llama Estela quedará embarazada. Y cuando ella da a luz un varoncito que él llamará Yván, Silvio no manifiesta ningún amago de interés paternal, ni tampoco de apego afectivo a esta joven madre a quien en realidad no conoce ni trata de conocer mejor. La chica va a fugar y abandonar a su hijito y al padre, quien no sabrá cómo apañárselas con el bebe. No encuentra otra solución que abandonarlo a Dora, la abuela que tampoco lo quiere y que lo rechaza como un estorbo en su vida de vieja rezongona. Más tarde Estela lo raptará y se lo llevará con rumbo desconocido. Esta es la primera parte de la novela.
A partir de este momento, la vida de Silvio Lobo es pura decadencia.
Y comienza una segunda parte que es una "road" novela con fondo psicoanalítico donde Silvio Lobo parte a la deriva a través de la vasta geografía de la pampa argentina atravesando Carmen de Patagones, Tandil, Bahía Blanca, buscando a Estela y por ende a su hijo. Pero sobre todo a Estela porque no logra entender que ella lo haya dejado sin ninguna explicación (explicación que el lector no tendrá jamás). Para la búsqueda, tomará los servicios de Marcusse, un viejo y roñoso detective que es una parodia grotesca del detective clásico; el hombre es un « filósofo del azar » porque aplica a sus casos las leyes del juego de azar; Marcusse será el nexo entre el padre y el hijo. El ambiente de la pampa argentina es un desierto privilegiado donde perduran códigos diferentes a los de una gran ciudad, donde quedan reminiscencias de la dictadura, o sea, sociedades cerradas dominadas por poderes ocultos.