Resumen y sinopsis de Ghost World. Mundo fantasmal de Daniel Gillespie Clowes
La historia de Enid y Rebecca, dos amigas que afrontan la exploración del no siempre agradable camino a la madurez y el incierto futuro de su intrincada relación. Daniel Clowes conjura una historia tan tierna como objetiva de su frágil existencia, capturando los temores mundanos y las tragedias cotidianas de dos jóvenes que ya no son niñas, pero que tampoco son aún mujeres. Ghost World es considerado como uno de los grandes cómics underground estadounidense de las últimas décadas.
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Destaco la gran profundidad en la construcción de los personajes adolescentes.
Como un Salinger que se hubiera pasado al cómic, Daniel Clowes describe la angustia adolescente, la inseguridad y las dudas que surgen al enfrentarse por primera vez al mundo. A un mundo televisivo, feo y gris, cuyos habitantes se encuentran tan perdidos e inadaptados como uno mismo, donde lo normal llega a confundirse con lo anormal. La mirada del autor hacia sus protagonistas es distanciada a la vez que cercana, comprensiva (aunque no lo parezca), por la manera en la que enfoca su amistad y los particulares lazos que las unen. Lo hace como si fuera un simple observador, a lo largo de una serie de anécdotas irrelevantes que acertadamente sugieren, más que explicar, sirviéndose de la autorreferencialidad y de elementos pop para recrear esa cotidianeidad donde nada parece ocurrir.
Un relato costumbrista que se centra en las relaciones humanas y en los aspectos más íntimos de los personajes, y una obra imprescindible dentro de su género.
La perturbadora paleta de colores (en la cual domina un verde pálido, fantasmal, televisivo), los rostros y gestos particularmente bien logrados, logran transmitir una atmósfera opresiva y extraña, trazando un marco que le permite a Daniel Clowes comenzar a contar una historia sobre la angustia adolescente, sobre el absurdo y el vacío contemporáneo.
Por momentos, sentí cierto sabor que me recordó a "El Guardián entre el Centeno", pero sinceramente creo que si bien el autor ha logrado transmitir adecuadamente el sentimiento "fantasmal" que impregna la historia, también puedo decir que por momentos hay situaciones y personajes algo forzados o caprichosos, haciéndose algo lento el ritmo y hasta aburrido. (Está muy lejos de alcanzar las cotas de la obra de Salinger, si se me permite semejante comparación).
Buena novela, pero no me pareció una obra excelente.
Junto a Wilson y Ice Have, este cómic es una obra maestra. Mucho mejor que la película que hicieron. El hastío de sus protagonistas se transmite. Me acordé del malestar de Holden Caulfield, el protagonista de El guardián entre el centeno. Las páginas, en bitono verde, resultan enfermizas, como la historia misma.