Resumen y sinopsis de La vida según Arnold de Giles Milton
Les presentamos a Arnold Trevellyan: carismático, entusiasta y, en cierto modo, extraño. Su pasión por las setas solo se iguala al amor que siente por Flora, su esposa durante doce años. Un buen día, buscando setas, Arnold hace un hallazgo sorprendente que trastocará todo su mundo. Abandona a Flora y pone rumbo al Pacífico sur, donde acaba casándose con la reina de una remota isla tropical.
Sin embargo, no todo es lo que parece en el idílico reino de Arnold. En una serie de casetes remitidas a su mejor amigo, confiesa hallarse atrapado en una conspiración internacional en la que las setas contienen la clave de la vida y la muerte.
La vida según Arnold, solo presenta alguna utilidad como un breve tratado de micología. Y es que además de setas (montones de setas) el resto de la trama es disparatada y un tanto burda. Además de ser incapaz de enganchar al lector que va pasando páginas conteniendo los bostezos.
Giles Milton es un escritor bastante pobre. En este libro pseudo-humorístico da el pego gracias a un estilo sencillo. Pero la estructura y el desarrollo resultan nefastos. El primero es muy poco original. Mientras que el segundo es aburrido y confuso.
Los personajes merecen un capítulo aparte. Resultan inverosímiles, irritantes y estúpidos. Están poco trabajados y peor perfilados.
La historia es un despropósito total. En principio seguimos la vida de Arnold, un personaje que parece tener algún trastorno mental que le lleva a padecer una fuerte obsesión con las setas. Por motivos que se irán desvelando, Arnold abandona a su mujer, Flora, con la que llevaba más de 20 años casado, para irse al otro lado del mundo, una isla del pacífico y casarse con Lola, la reina del lugar. Delirante ¿no? Pero, aunque suene atractivo, la trama se vea complicando hasta el absurdo. Y si a eso le sumamos la insistencia del protagonista a hablar durante párrafos y párrafos de setas, el libro se te hace inevitablemente pesado.
El final es lo único medianamente inesperado de todo.. Pero a mi me disgustó enormemente, ya que como todo en la novela, resulta un sinsentido y poco creíble.
Resumiendo, La vida según Arnold es un absoluto horror. Y pese a que intenta colártelo como libro de humor, la verdad es que resulta bastante triste, además de insoportable. Ni todas las setas del mundo lograrían hacerte tragar este libro que, por lo demás, es totalmente prescindible.
La vida según Arnold, solo presenta alguna utilidad como un breve tratado de micología. Y es que además de setas (montones de setas) el resto de la trama es disparatada y un tanto burda. Además de ser incapaz de enganchar al lector que va pasando páginas conteniendo los bostezos.
Giles Milton es un escritor bastante pobre. En este libro pseudo-humorístico da el pego gracias a un estilo sencillo. Pero la estructura y el desarrollo resultan nefastos. El primero es muy poco original. Mientras que el segundo es aburrido y confuso.
Los personajes merecen un capítulo aparte. Resultan inverosímiles, irritantes y estúpidos. Están poco trabajados y peor perfilados.
La historia es un despropósito total. En principio seguimos la vida de Arnold, un personaje que parece tener algún trastorno mental que le lleva a padecer una fuerte obsesión con las setas. Por motivos que se irán desvelando, Arnold abandona a su mujer, Flora, con la que llevaba más de 20 años casado, para irse al otro lado del mundo, una isla del pacífico y casarse con Lola, la reina del lugar. Delirante ¿no? Pero, aunque suene atractivo, la trama se vea complicando hasta el absurdo. Y si a eso le sumamos la insistencia del protagonista a hablar durante párrafos y párrafos de setas, el libro se te hace inevitablemente pesado.
El final es lo único medianamente inesperado de todo.. Pero a mi me disgustó enormemente, ya que como todo en la novela, resulta un sinsentido y poco creíble.
Resumiendo, La vida según Arnold es un absoluto horror. Y pese a que intenta colártelo como libro de humor, la verdad es que resulta bastante triste, además de insoportable. Ni todas las setas del mundo lograrían hacerte tragar este libro que, por lo demás, es totalmente prescindible.