Resumen y sinopsis de Un festín en palabras de Jean-François Revel
La literatura sobre el arte de la cocina es casi tan antigua como la cocina misma. El título de este libro, por ejemplo, proviene de una frase de Ateneo, autor griego que, en el siglo III, dio cuenta de todos los conocimientos y todos los "chismes" de la Antigüedad sobre, entre otros temas, la gastronomía y los gastrónomos. Sin embargo, no es fácil hacerse una idea precisa, palpable, concreta, de las cocinas del pasado. Pongamos por caso: ¿qué gusto tenían los vinos que bebían César u Horacio? ¿Qué sabor tenían los estofados en la Edad Media o los pâtés que comía el glotón de Rabelais?
Este libro resurge hoy, en una edición enteramente revisada y muy ampliada por el propio Revel, en la misma colección, también totalmente renovada, que lo vio nacer en 1980.
Hace veintinueve años, Un festín en palabras fue, de hecho, todo un festín para quienes, al menos en España, aún desconocían el papel primordial de la gastronomía -y de su historia- en la tradición cultural de cada país. Hoy en día, Un festín en palabras, en su nueva versión, reaparece, pues, como todo un clásico en el género.
Los tratados de cocina destinados a los profesionales son con frecuencia oscuros y poco detallados para los profanos de nuestra época. Mucho más elocuentes resultan los testimonios espontáneos de los comensales que transcribieron sus experiencias palatales y culinarias en libros de memorias, correspondencias, novelas y obras de teatro. Por lo tanto, Revel nos invita aquí a seguirle en un paseo literario por dos mil quinientos años de recuerdos gastronómicos, desde la Atenas de Pericles hasta la nouvelle cuisine, pasando por la Roma imperial, la Edad Media europea, el descubrimiento del Nuevo Mundo, al que tantos ingredientes culinarios debemos, la Italia de los Médicis, la Francia de Luis XIV o la del siglo XIX, sin olvidar las cocinas del terruño y las tradiciones populares.
"El gastrónomo ni se siente prisionero de la tradición, ni se deja impresionar por la novedad. Es a la vez curioso y desconfiado, investigador y precavido. Busca las sensaciones nuevas y, al mismo tiempo las teme. Hay gastronomía cuando hay polémica permanente entre antiguos y modernos y cuando hay un público capaz, por su competencia y riqueza, de arbitrar tal querella."
Libro que despierta la curiosidad por conocer la antigua cocina y la gastronomía de culturas milenarias, sus métodos de cocción, combinaciones de ingredientes, recetas, a los ojos de hoy, por demás peculiares, la descripción de los grandes banquetes en honor a los reyes, los más destacados "chefs" que dejaron huella en la materia, como el romano Apicio Gavio, el todavía misterioso L.S.R (presunto cocinero del siglo XII quien escribió la obra "L´Art de bien Traiter"), Platino de Cremona, los franceses Grimod de la Reynière, Guillaume Tirel "Taillevent", el impresionante Antonin Carême, y más cercanos a nuestros días como Raymond Oliver, entre otros, quienes legaron estilos de cocina acordes a su época y reinventando el arte gastronómico que les granjeó fama y reconocimiento internacional, sobre todo en las altas esferas de las cortes monárquicas, así como en audiencias modernas como el caso de Oliver con sus programas de televisión.
También se hacen menciones de grandes escritores que dejaron referencias culinarias en algunas de sus obras, como el antiguo poeta Arquestrato y su poema "El buen comer", las sátiras de Horacio, el Decamerón de Boccaccio, Nostradamus y sus recetas de mermeladas, el "Diccionario de cocina" de Alejandro Dumas y algunos otros.
Unas interesantes ilustraciones de esculturas, pinturas y tapices de varias épocas históricas, que evidencian la importancia de la cocina y sus métodos, junto a comentarios y reflexiones intercalados del autor, completan un excelente trabajo, bien tratado desde el punto de vista literario, de lectura ágil y amena. Un gran viaje al pasado gastronómico de las sociedades de antaño.