Resumen y sinopsis de El mapa y el territorio de Michel Houellebecq
Si Jed Martin, el protagonista de esta novela, tuviera que contarles la historia, quizá comenzase hablándoles de una avería del calentador, un 15 de diciembre. O de su padre, arquitecto conocido y comprometido, con quien pasó a solas muchas noches navideñas.retratos de personalidades de todos los sectores (entre ellas el escritor Michel Houellebecq), captados en el ejercicio de su profesión.
También debería referir cómo ayudó al comisario Jasselin a dilucidar un caso criminal atroz, cuya aterradora puesta en escena dejó una impronta duradera en los equipos de la policía. Al final de su vida, Jed alcanzará cierta serenidad y ya solo emitirá murmullos.
El arte, el dinero, el amor, la relación con su padre, la muerte, el trabajo, Francia convertida en un paraíso turístico… son algunos de los temas de esta novela decididamente clásica y abiertamente moderna.
La he encontrado pretenciosa y aburrida (con alguna que otra sorpresa pasajera). Los personajes no me han despertado ninguna empatía, apenas me han interesado. Las relaciones entre ellos carecen de conflicto, pues las relaciones resultan muy débiles.
Me ha dado la sensación de que no había trama, de que el relato divaga, salpicado de información y alguna ocurrencia.
La gestión del tiempo también podría mejorar. A veces no sabes si te habla del presente o del pasado.
Algunas frases profundas y/o ambiguas (y algunas bastante absurdas o relacionadas con ideas muy recurrentes). En conjunto, transmite pesimismo y amargura. Por supuesto, siempre se puede argumentar que plantea una reflexión crítica sobre nuestra sociedad (o algo así), pero la gracia seria hacerlo de manera que la novela resultara interesante.
Si esta es la mejor novela del autor, no creo que vuelva a leer ninguna más.
Algo decepcionante después de haber leído otras obras del autor.
Uno de los libros que más me ha gustado de este autor, en el que aparece como un personaje él mismo.
Una muy buena novela, que te puede arrancar sonrisas y que también te hace reflexionar, llena de personajes controvertidos. El autor parece reírse de si mismo y se convierte en uno de sus personajes.
Una novela diferente a lo escrito por el autor anteriormente, donde se reinventa y renueva con la pedantería clásica con la que suele obsequiarnos. Muy recomendable.
Buen libro. El autor coquetea en algunas ocasiones con la pedantería pero aun así firma un libro entretenido y con reflexiones muy interesantes acerca de la sociedad occidental actual.
Me pareció una novela muy floja tanto en su concepción como en su ejecución, Incluso percibí una narrativa narcisista, nada convincente. Y ese juego agarrado con alfileres en torno a los mapas de carreteras, tan inconsistente...
De lo mejor del autor. Crítico, pesimista y ácrata como siempre, esta vez Houellebecq entierra la sexualidad y nos brinda una doble dosis de su personalidad. Su inclusión en la novela, como desgraciado y cómico secundario, incluyendo su asesinato y sepelio, puede engañar al lector. El verdadero Houellebecq se esconde en la piel del protagonista. Varios "recaditos" para esos enemigos literarios que nunca le matarían, por falta de agallas. La mención en los recordatorios a Wikipedia, más de lo mismo. Se ríe de todo y de todos, pero lo hace maravillosamente bien.
Aunque después de leer la novela te das cuenta de que no sabes muy bien cual es su argumento, contiene muchas reflexiones del autor que son muy interesantes.
Este autor, en esta obra es impagable, es diferente, original, divertido y triste, ojalá todos los años publique un libro.