Resumen y sinopsis de El burro flautista de Tomás de Iriarte
Cerca de unos pradospasaba un borrico
por casualidad.
Una flauta en ellos
se dejó olvidad
por casualidad.
Acercóse a olerla
el dicho animal,
y dio un resoplido
por casualidad.
En la flauta el aire
se hubo de colar,
y sonó la flauta
por casualidad.
«¡Oh!, dijo el borrico,
qué bien sé tocar!
¿Y dirán que es mala
la música asnal?»
Sin reglas del arte
borriquitos hay
que una vez aciertan
por casualidad.
Ha participado en esta ficha: yiyolon
Sin reglas del arte, el que en algo acierta, acierta por
casualidad. Otra moraleja que casi podríamos recordar a alguien a diario, trasmitida de manera graciosa y divertida.