Resumen y sinopsis de Los cuadernos de Don Rigoberto de Mario Vargas Llosa
Rigoberto, un maduro empleado de una compañía de seguros, combate su banal existencia con una rica imaginación que va plasmando en cuadernos. Todo lo que Rigoberto no se atreve a hacer, no se atreve a vivir por sí mismo, sus audacias y aventuras imaginadas, sus deseos ocultos, van quedando reflejados en estas anotaciones que lo distancian cada vez más de su vulgar existencia. Los cuadernos son como un baúl del que se van extrayendo inesperados relatos, atesorados por el personaje con mayor celo que si fueran reales, y constituyen un refinado compendio de la imaginación erótica. Pero la particularidad de estas fantasías es que parten siempre de pinturas, obras literarias y piezas musicales constituyendo un verdadero y exquisito índice de la pintura y la literatura eróticas de todos los tiempos.Como contrapunto al florido universo de don Rigoberto, está el inquietante y perturbador ambiente que se forja alrededor de su pequeño hijo, Fonchito. Obsesionado con la vida y la obra del pintor austríaco Egon Schiele, el muchacho se sueña como la encarnación del pintor maldito y su misterioso mundo de niñas perversas y autorretratos angustiosos. Entre ellos, la madrastra. Una mujer que es para ambos la figura principal de ese doble mundo de deseos y realidades. Una mujer a la medida de sus más exigentes fantasías.Los cuadernos de don Rigoberto es, sin lugar a dudas, la obra definitiva de Mario Vargas Llosa sobre el erotismo. En ella se despliegan ante el lector las claves que nuestra memoria cultural ha dado, a través del arte, sobre los misterios del placer sensual.
Una novela entretenida pero sobre todo sensual y con un final inesperado, bien para pasar el rato.
Gran novela. Perfectamente narrada que te engancha, Vargas Llosa maneja el erotismo y la sensualidad de un modo fino y elegante.
Erotismo fino y de buen gusto que te mueve el piso y algo mas en algunos de sus capítulos.
Vargas LLosa me dejó bastante helado con esta continuación de "Elogio de la madrastra".
Si tuviera que prescindir de alguna de sus novelas, ésta y "El sueño del celta" estarían entre ellas.
La narración vuelve a girar entorno al deseo, la sensualidad, y el goce sexual más acentuado.
Un cuadro refinado y estético del erotismo que no me llenó; y que incluso me costó acabarlo.
Admiro su lenguaje, su forma portentosa de escribir, pero con esta obra no tocó la fibra lectora que hay en mí.
Por momentos se me hizo cargante y un pelín pesado.
Continuación de Elogio de la madrastra. Los mismos personajes, pero con una profundización en don Rigoberto y su mundo interior. Me hizo pensar si no era el propio Vargas Llosa y sus mezquindades lo que aquí nos presentaba.
Una novela erótica que sin ser de las mejores del autor nos deja pensando en el personaje y sus travesuras, para pasar un buen momento.
No me gustan las novelas eróticas de Vargas Llosa.
Una novela regular nomás, cuya historia no te llega a envolver del todo, por ser algo simple y confusa. Sin embargo nuevamente, don Mario demuestra aquí, , su indiscutible talento narrativo
Una perfecta obra para el placer propio y el verdadero conocimiento de uno mismo. Uno de mis libros favoritos.
Un libro atípico para mí, pero que me ha parecido gracioso como combina de forma peculiar diversos "hechos" sin mucha trascendencia.