Resumen y sinopsis de Homo Gilipollensis de Manuel Aparicio
El hombre funciona como un virus más de la naturaleza. En su pasada por la Tierra se ha convertido en una sinrazón de vida, un sinsentido para él y para los demás, y una ilusión para el futuro próximo-lejano de la llamada civilización, que al final se convertirá en olvido cósmico. Mientras estuvo presente en el suelo, no tuvo piedad de sus congéneres, los encadenó, los explotó, los sacrificó: el único objetivo era despistarle con idiotologías, para esclavizarle y chuparle hasta el último vapor de su sudor. El hombre se sometía placentero y despreocupado. Para analizar ese animal gilipollensis, hay que salirse fuera de la Tierra y de uno mismo, volar muy alto y observar la forma de actuar de los que le dominan y la intranscendente postura personal para librarse de la alienación a la que es sometido por quienes le gobiernan, dominan y manejan su existencia, convirtiéndolo en animal de producción y consumo. Pero se cree algo, importante, gilipollas al fin de cuentas.