Resumen y sinopsis de El año de la muerte de Ricardo Reis de José Saramago
A fines de 1935, cuando acaba de fallecer Fernando Pessoa, llega al puerto de Lisboa un barco inglés, Highland Brigade, en el que ha viajado, desde Brasil, Ricardo Reis, uno de los heterónimos del gran poeta portugués. A lo largo de nueve meses cruciales en la historia de Europa, durante los que estalla la guerra de España y se produce la intervención italiana en Abisinia, asistiremos a la última etapa de la vida de Ricardo Reis, en diálogo con el espíritu de Fernando Pessoa que acude a visitarle desde el cementerio en los momentos más inesperados. Es la época de las plumas estilográficas, de las radios Pilot, de las Juventudes Hitlerianas, de los topolinos, en una Lisboa atlántica y lluviosa cuya atmósfera envolvente se convierte en el verdadero protagonista de esta fascinante experiencia narrativa. El año de la muerte de Ricardo Reis es una lúcida meditación, a través de un poeta y una ciudad, sobre el sentido de toda una época.
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Amo a Saramago y sin embargo, esta siempre me ha resultado su obra más áspera e insípida de todas cuantas escribió. Eso no quita para que sea magnífica, otro ejemplo de esa maestría que hizo tan suya y tan particular. Que el propio título me anuncie el final, tampoco me motiva demasiado. Qué se le va a hacer.
Es un libro lento, un poco aburrido, me sorprendió porque no logre terminarlo, Saramago siempre me ha impresionado con su lectura, este ha sido el primero que no pude leer.
No es que el libro sea malo. Tengo que reconocer que está bien escrito y que tiene muchas bondades, como el momento histórico que retrata, vocabulario nuevo, conocer algo de la cultura portuguesa. Sin embargo, me parece que ocupa demasiadas páginas para contar algo tan sencillo, además que siempre me ha aturdido la ingenuidad de muchos de sus comentarios sobre la condición humana. Me aburrió más de lo esperado.
Magnífica novela. Es la primera que leo de Saramago y me ha asombrado su altura estilística, su inteligencia y su humildad, el escritor portugués hace de Lisboa un lugar mágico, nos lleva de paseo por sus calles adoquinadas, a ver los barcos desde O Alto de Santa Catarina, a viajar en el tranvía y hasta a tomar café en Irmâos Unidos nada menos que con Fernando Pessoa. Tuve la necesidad -o curiosidad- (no conocía la obra de Pessoa) de coger en la biblioteca una antología del poeta luso y la experiencia de simultanear la lectura de ambos libros ha sido muy enriquecedora, la recomiendo a cualquiera, la figura de Pessoa es apasionante.
Además, Saramago nos narra una historia amorosa muy bien llevada y describe la situación política y social del Portugal de Salazar, todo ello con fina ironía y una humanidad francamente entrañable. Creo que ésa es la palabra que mejor describe a esta novela. Entrañable.
Una auténtica delicia leer esta novela que nos sumerge en la Lisboa de mediados del siglo pasado y en una atmósfera de incertidumbre y nostalgia.
No es el libro más popular de Saramago, pero desde mi humilde punto de vista creo que es su obra más importante. Una lectura que enriquece cualquier paseo por Lisboa, y además es un magnífico puente para despertar interés hacia la figura más relevante de la literatura portuguesa; el inolvidable Fernando Pessoa.
Más que nada, el gran mérito de esta novela es la atmósfera que crea. Es una ventana a toda una época, aunque siento que perdí mucho por no conocer Lisboa o la historia de Portugal para conectarme un poco más.
Siento que es de esos libros que hay que leer al menos dos veces para comprenderlo a cabalidad.
La crítica ha calificado Todos los nombres, como la mejor historia de amor de la literatura portuguesa, para mí ésta es mejor, más de mi gusto. Pero eso es sólo una opinión, claro.
Ricardo Reis, vuelve a Lisboa triste sabiendo que Pessoa ha muerto, pero no va a impedir eso el que siga hablando con él, pero la mejor sopresa será la compañía de su camarera; cuánta dulzura en sus besos.