Resumen y sinopsis de Postludio de Gottfried Benn
A poco más de un año antes de su muerte, en un café de la Bonzer-Strasse de Berlin, la calle en la que desde hacía algunos años compartía un pequeño piso con su tercera esposa, Gottfried Benn regaló un ejemplar de su Postludio-el autor le había puesto el título francés de "Aprèslude"- a su amigo, el escritor y periodista Walter Lennig. En la portadilla escribía, a modo de dedicatoria, el último verso de uno de los poemas de este libro: "selah, fin del salmo". La palabra hebrea "selah", que figura al final de muchos salmos, es de origen desconocido y apenas se sabe nada sobre su significado; es posible que, además de indicar el final de la plegaria, sea un aviso a los fieles para que se dispongan a la siguiente parte del servicio religioso. En el lenguaje coloquial alemán de hasta los primeros años de este siglo se usaba a veces con el sentido de "listo", "no se hable más". Es muy probable que con esta frase Gottfried Benn quisiera algo más que citar un verso de su libro. Postludio es el último de los poemarios de este autor, de algún modo el final de su "salmo poético".