Excelente novela, en el Saigon colonial, donde el personaje Fierce sufre una trasformación espiritual, al enamorarse de la joven Sélysette.
Un retablo, de la decadencia colonialista donde se dan las más bajas pasiones, sin escrúpulos, de allí que los Civilizados sean aquello sin moral ni principios, "el mínimo esfuerzo, con el máximo placer.
Excelente novela, en el Saigon colonial, donde el personaje Fierce sufre una trasformación espiritual, al enamorarse de la joven Sélysette.
Un retablo, de la decadencia colonialista donde se dan las más bajas pasiones, sin escrúpulos, de allí que los Civilizados sean aquello sin moral ni principios, "el mínimo esfuerzo, con el máximo placer.
Buena novela y un premio merecido.