Resumen y sinopsis de Memoria de un manicomio de Enrique González Duro
"Llegar a un manicomio es como aterrizar de improviso en un territorio desconocido e inhospitalario, gélido y extrañamente muerto, pese al hacinamiento de las gentes que lo habitan, unas gentes que no se mueven, miran sin desear, habitan sin palabras: dan ganas de salir corriendo, aún en el caso de ser el nuevo Director... Cuando llegué, se me entregó un enorme manojo con las llaves de todas las puertas, siempre cerradas, de aquella horrenda institución. Rechacé instintivamente el llavero, símbolo de la máxima autoridad en una pirámide absolutamente jerarquizada, y nunca utilicé llave alguna... La imagen del nuevo Director que, sin bata blanca, sin los acólitos de rigor y sin llaves, llamaba a todas las puertas, indicaba que algo comenzaba a cambiar.. Las puertas se fueron dejando abiertas".Ha participado en esta ficha: yiyolon