Resumen y sinopsis de Demonios en el convento de Enrique González Duro
Frente a la sensación de crisis generalizada, los españoles del siglo XVII buscaron refugio en la ilusión de considerar reales todo tipo de prodigios maravillosos. Se constituyeron en “una república de hombres encantados”. Reverdecieron las artes mágicas, se extremó la religiosidad y surgió la cultura barroca, que era ensoñación, desmesura, extravagancia y agonía. Los demonios, convertidos en poderes taumatúrgicos, saciaban la ansiedad y los deseos de fenómenos extraordinarios de quienes no acertaban a discernir entre locura, hechicería y santidad. Así se explica que casi todas las monjas del convento madrileño de San Plácido, situado en la calle de San Roque esquina a la del Pez, se creyeran poseídas por los demonios, que a través de ellas –y siempre “con el permiso de Dios”- realizaban profecías sobre asuntos trascendentales, embaucando a personajes políticos tan poderosos como el conde-duque de Olivares, que se carteaba con la priora del convento, principal inductora de los escandalosos episodios de posesión diabólica e histeria colectiva que allí se dieron.Ha participado en esta ficha: yiyolon