El título ya es una declaración de intenciones. Alude al principal protagonista de la historia, el río Marañón, que visto desde la cima más alta del valle por donde discurre, se asemeja a una gran serpiente de oro, al contener pepitas de este preciado metal. En busca del mismo llega de la capital Osvaldo, el cual pone en evidencia esa contraposición entre el pensamiento de la ciudad y los ideales salvajes de los indígenas. Éstos indios son balseros, se dedican con sus balsas a pasar a la gente de un lado al otro del lecho fluvial. Y es que tienen al río como principio y fin de sus días: todo se articula entorno a él. Hay por tanto un retrato de la dura vida en la jungla peruana, en la cual la muerte acecha en forma de enfermedades, reyertas, ataques de animales (serpientes, insectos, pumas, murciélagos...) y, ante todo, el impetuoso flujo del río. En resumen, es una novela que demuestra que el hombre está a merced de la Naturaleza. Me gustó por estas ideas, aunque tuve que acudir al diccionario al estar el libro plagado de vocablos sudamericanos.
El título ya es una declaración de intenciones. Alude al principal protagonista de la historia, el río Marañón, que visto desde la cima más alta del valle por donde discurre, se asemeja a una gran serpiente de oro, al contener pepitas de este preciado metal. En busca del mismo llega de la capital Osvaldo, el cual pone en evidencia esa contraposición entre el pensamiento de la ciudad y los ideales salvajes de los indígenas. Éstos indios son balseros, se dedican con sus balsas a pasar a la gente de un lado al otro del lecho fluvial. Y es que tienen al río como principio y fin de sus días: todo se articula entorno a él. Hay por tanto un retrato de la dura vida en la jungla peruana, en la cual la muerte acecha en forma de enfermedades, reyertas, ataques de animales (serpientes, insectos, pumas, murciélagos...) y, ante todo, el impetuoso flujo del río. En resumen, es una novela que demuestra que el hombre está a merced de la Naturaleza. Me gustó por estas ideas, aunque tuve que acudir al diccionario al estar el libro plagado de vocablos sudamericanos.