Resumen y sinopsis de El hijo de la garza de Antonio Pérez Henares
El escritor y periodista Antonio Pérez Henares vuelve a sorprendernos, tras Nublares, con esta segunda novela de su magistral «Saga Prehistórica», ambientada en un momento trascendental en que los hombres pasan a dominar y explotar la naturaleza.
Los días del Paleolítico llegan a su fin, mientras la revolución neolítica, que cambiará el destino de la Humanidad, comienza a vislumbrarse.
En este periodo de transición, dos jóvenes, el Hijo de la Garza y el Arquero, emprenden un verdadero viaje iniciático que los lleva de las montañas y estepas del centro de la actual península Ibérica al mismo mar, a descubrir el amor y a entrar en contacto con otros pueblos diferentes y sus costumbres.
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El Hijo de la Garza y Viento en la Hierba, y su amigo el Arquero de Nublares, hijo de Ojo Largo y Ojos de Cielo, son los dos protagonistas de este relato. Llegan a ser los mejores jóvenes del Clan del Cañón del Río Dulce; aprenden a cazar, pescar, a recolectar,a fabricar sus herramientas y armas, a preparar medicinas... pero no es la narración que nos lo va descubriendo con ingeniosas historias, sino que el autor abusa de largas digresiones.
Convertidos ya en cazadores, los dos jóvenes emprenden un largo viaje hacia la Gran Agua y se maravillan al encontrar un nuevo paisaje más acogedor, más cálido y con nuevas plantas y aromas, pero sobre todo al descubrir un pueblo que ha entrado ya en el Neolítico.
Al final llegan a encontrar los dos últimos hombres del Pueblo Antiguo. Todo demasiado tópico, predecible. Creo que a la narración le falta imaginación y detalle. Durante algunas secuencias al narrador se le olvidan los dos perros que acompañan a los dos jóvenes protagonistas.
Con el regreso a su tribu del Hijo de La Garza y el Arquero se pretende dar un final redondo a la historia, pero como en "Nublares" creo que este relato se queda en bosquejo de lo que podría haber sido una interesante y rotunda novela.