Resumen y sinopsis de La importancia de las cosas de Marta Rivera de la Cruz
La pacífica existencia de Mario Menkell –un tímido profesor universitario autor de una única y exitosa novela– cambia de golpe cuando tiene que hacerse cargo de los efectos personales de su inquilino, Fernando Montalvo, que acaba de suicidarse. El atribulado Menkell descubrirá que el piso del que es propietario está abarrotado de los objetos más variopintos: una colección de vitolas de puros, un lote de gramolas antiguas, porcelanas, miniaturas, huchas de cerámica, soldados de plomo... Tras el desconcierto inicial, Menkell entenderá que las cosas de Montalvo pueden ser un generoso guiño del destino, que por una vez parece haberse puesto de su parte. Ayudado por Beatriz, la mujer a la que ama en secreto desde hace años, Mario Menkell será capaz de reconstruir la misteriosa existencia de Fernando Montalvo y encontrará así una historia excepcional que puede brindarle la gran oportunidad de su vida.
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Una historia muy bien llevada por la autora, todo se conecta perfectamente, los personajes, sus historias y nos hace llegar a un final que deja el corazón lleno de alegría.
Libro ameno, aunque hay partes que se pueden omitir. Al principio se hace un poco pesado pero al avanzar te metes más en el libro y se lee mucho más rápido.
Esta novela engancha desde el principio. Todo está bien, los personajes me encantan y la forma en que hablan los hacen cercanos al autor, como si los conociéramos de toda la vida. Al igual que otros libros de esta autora tiene una prosa maravillosa y frases inolvidables.
Otra bonita historia de esta autora, con unos protagonistas diferentes que hacen que te intereses por la trama hasta el final de la historia. Extraordinario.
Precioso, bien escrito, historia que engancha. Esta autora me encanta, hasta ahora no me ha decepcionado con ninguno de sus libros.
Sencillamente, me ha encantado.
Es una historia muy tierna de personajes que podrían clasificarse como "socialmente inadaptados", pero que en realidad son personas extremadamente sensibles.
La historia encierra un pequeño secreto que, sin que pueda calificarse de novela de misterio, hace su lectura aún más ágil.
Me encanta como escribe la autora; un estilo sencillo a la vez que con las palabras perfectamente escogidas. La dosis justa de descripción y un dibujo perfecto de cada personaje sin caer en prototipos.
"En tiempos de prodigios" ya me entusiasmó y esta otra novela no ha decepcionado mis expectativas.
Falla en alguna pequeña cosilla (que si Decano o Rector....) y si la comparamos con otras obras de la autora puede parecer inferior. La verdad es que he disfrutado leyéndola. Me ha gustado y he dudado en calificarla aún mejor.
Es el segundo libro de la autora que leo y disfruto. Si bien no me ha parecido tan brillante como En tiempo de prodigios, creo que está bastante bien construido y, sobre todo, tiene una ironía bastante crítica hacia los ambientes de la universidad privada (lo que me encanta como aférrima defensora de la educación pública que soy).
Algunos de los sucesos son algo previsibles, pero es una novela muy recomendable.
No me ha gustado nada esta novela. Creo que casi la mitad del libro son páginas que sobran en la obra o son historias secundarias que hacen que el libro se haga pesado y pierda interés, en especial las últimas 60 páginas del libro.Me ha parecido bastante inverosímil y después de leer anteriormente 3 obras de esta autora creo que es la novela que menos recomendaría. "Que veinte años no es nada o "En tiempos de prodigios " están en mi opinión a años luz de esta obra
Es un libro delicioso, desde que empiezas a leerlo te das cuenta que te encanta y te enganchas en la historia. En esta novela no hay personajes históricos, ni una época transcendental de la historia ni un secreto que afecta a la humanidad, y te interesa mucho que cualquiera de esas novelas, sólo son personas corrientes. El protagonista es un hombre gris a la vista superficial de los demás, pero no es así, es un cuento delicioso que disfrutas desde la primera línea. En esta novela hay humanidad y eso no fácil de encontrar.