Resumen y sinopsis de Mendel el de los libros de Stefan Zweig
Narra la trágica historia de un excéntrico librero de viejo que pasa sus días sentado siempre a la misma mesa en uno de los muchos cafés de la ciudad de Viena. Con su memoria enciclopédica, el inmigrante judío ruso no sólo es tolerado, sino querido y admirado por el dueño del café Gluck y por la culta clientela que requiere sus servicios. Sin embargo, en 1915 Jakob Mendel es enviado a un campo de concentración, acusado injustamente de colaborar con los enemigos del Imperio austrohúngaro. Un breve y brillante relato sobre la exclusión en la Europa de la primera mitad del siglo xx.
Han participado en esta ficha: yiyolon Manuel Alfredo
Me quedo con ese poso de bibliofilia que emana y esa elegancia para concluir la historia tan genuina en Zweig, un último párrafo que he subrayado por su honda carga filosófica.
Con una prosa tan delicada, entiendo esta obra como el poder destructor o corruptor que tienen las guerras sobre las almas puras.
Muy recomendable.
"Mendel el de los libros" de Stefan Zweig, es un mini relato muy triste y a la vez me pareció tierno. Lo recomiendo.
En unas cuantas páginas se condensa toda la magia de la pluma de Zweig: se pasa del asombro a la nostalgia, y de esta al dolor por los olvidos, pecados y omisiones de la guerra. Siempre haciendo uso de un lenguaje exquisito y casi musical, Zweig ofrece un fresco de la Viena de postguerra y los estragos que dejó a su paso; profundos cambios sociales en donde el pragmatismo reemplaza a lo tradicional, de una manera rigurosa y despiadada.
El protagonista de la narración, Jakob Mendel, es un bibliófilo dotado de una memoria excepcional; una enciclopedia ambulante que durante muchos años permanece en el café Gluck, leyendo durante horas, y quien es consultado por estudiantes, académicos e investigadores. No obstante, su ensimismamiento en los libros y el desdén por informarse acerca de la actualidad y las noticias lo llevan a ignorar la guerra que se está viviendo, e inocentemente escribe correspondencia relacionada con asuntos de libros a personas en países enemigos, por lo que es investigado y encarcelado por las autoridades. Es un bellísimo texto sobre la nostalgia, el despojo, la ingratitud, el cambio y, sobre todo, el olvido.
Pequeño gran libro. Relato corto (60 páginas), un cuento intimista y reflexivo, que se lee del tirón porque atrapa y no lo sueltas; porque está muy bien escrito y dice mucho en muy poco.
Cuenta breve pero completa la historia de Jakob Mendel, "librero de viejo", judío ruso en Viena a principios de 1900, que posee una memoria enciclopédica y vive únicamente para retener datos sobre los libros que compra/vende, lo que le aísla del mundo y las circunstancias que le rodean.
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"...el hecho de poder tener un valioso libro entre las manos significaba para Mendel lo que para otros el encuentro con una mujer"
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Mención especial al último párrafo:
"...los libros solo se escriben para, por encima del propio aliento, unir a los seres humanos, y así defendernos frente al inexorable reverso de toda existencia: la fugacidad y el olvido".
Este libro es tan corto que no te da tiempo a sacarle la chicha. Es un relato cortísimo. Habla de lo efímero que es todo, de que todo puede cambiar de un momento para otro y de que puede que apenas dejemos huella.
Este pequeño relato, escrito por Stefan Zweig, que apenas alcanza las 60 páginas, es toda una delicia narrativa.
Es el segundo libro del autor que leo. El lenguaje es claro y sencillo, aunque no exento de belleza o lirismo. Sigue sorprendiéndome la enorme capacidad de Zwieg para describir emociones, que junto con un gran conocimiento de la psicología humana hacen de este pequeño libro una invitación a la reflexión sobre la discriminación en la Europa del siglo XIX.
La historia es bastante simple. A través de un narrador omnisciente, se nos describe, aunque de forma muy ligera, la vida de Jacob Mendel, personaje estrafalario, querido en el café Gluck, donde prácticamente vive, que tiene una memoria portentosa. Sus únicas obsesión, leer y memorizar catálogos, le hace ser muy apreciado por los coleccionistas de libros antiguos, negocio del que vive bastante bien. Pero por contra, la excesiva concentración que pone en sus únicas actividades diarias, le aparta de la realidad hasta tal punto que le llevará al desastre.
La novela aumenta en interés según vas leyendo, de forma que cuando ya estas completamente atrapado concluye. El final es previsible y correcto, aunque genera una gran tristeza y estupor por la historia de este individuo.
En suma, Mendel el de los libros, es una obra magníficamente escrita que se lee sin ningún esfuerzo y que recompensa con una historia singular.
"Mendel el de los libros", "Buchmendel" en su idioma original, mantenido en algunas traducciones al español, es un cuento repetidamente antologado. Lo merece. La delicada sensibilidad con la que se describe a Mendel y su triste trayectoria es inmejorable. Su lectura, un deleite
A pesar de la cortedad del relato, se describe un mundo peculiar, un café poblado y contaminado de humo, donde habita un sujeto frágil y especial. Un amante de los libros sin parangón. Su historia en principio intensa y satisfactoria, alejada un tanto de lo humano, es cruelmente violentada. Aprovecha el autor para hablar de la excelencia, de la concentración inaudita, de la injusticia de los seres humanos, de la falta de sensibilidad con los seres especiales y frágiles. Habla también de la fugacidad de nuestras vidas y del olvido. Entrañable, increíblemente bien escrito y traducido. Por supuesto recomendable.
Precioso cuento de Zweig, te sumerge en la Viena imperial, y narra la desafortunada peripecia de Mendel, al situarlo en el tiempo equivocado y lugar equivocado, en una situación kafkiana... muy entretenido.