Resumen y sinopsis de Las cenizas de Ángela de Frank McCourt
En este magnífico libro se narran los duros comienzos de una familia emigrante irlandesa vista a través de un niño. Por ello, el lector se encontrará con grandes dosis de humor y compasión transmitidos a través de su autor, Frank McCourt. La madre de Frank, Ángela, no tiene dinero para dar de comer a sus hijos porque el padre de Frank, Malachy, rara vez trabaja, y cuando trabaja se bebe el sueldo.
Galardonado con el prestigioso Premio Pulitzer, Las cenizas de Ángela fue llevado al cine en 1999 en una película que resultó todo un éxito de crítica y público.
Han participado en esta ficha: Acher samucga
Recomendable, triste, pero la realidad a veces supera a la ficción, es la historia de un padre desobligado y alcohólico, y la manera en que la esposa y los hijos tienen que subsistir es admirable. Está bien relatada y ambientada en su época, me gustó.
La historia, autobiográfica, es desgarradora, pero la forma de contar del autor no ayuda. A mí no me terminó de cumplir las expectativas que tenía puestas, que quizás eran muchas... Recomendable, pero no entra en mi top.
Conmovedor y a la vez chispeante e inocente relato de un niño pobre, irlandés y católico sobre su vida familiar y escolar en la Limerick de comienzos del siglo XX.
Conmovedora novela que hizo que visitara Limmerick y los rincones por donde malvivió el pobre Frank. Humor y tristeza se funden en una de las mejores novelas jamás escritas. Tengo la suerte de tener la primera edición americana firmada por Frank.
La historia de Frank es muy dura y emotiva. El libro resulta entretenido y te hace reflexionar sobre el valor que damos a lo que tenemos. Algunas partes se hacen un poco lentas y repetitivas.
Lento, pesado, repetitivo. Libro plano con personajes planos. Le cuesta avanzar mucho. Parece que está narrando todo el tiempo el mismo día.
Me parece un gran libro, la vida de Frank McCourt me gustó mucho y creo que es bien merecedora del premio Pulitzer que ganó.
Vaya libro que he leído. Solo hay algo peor que la pobreza extrema, la pobreza extrema junto al alcoholismo. Si lugar a dudas el uso del alcohol ha sido, es y será un triste amnésico de corta acción. Al igual que tantas drogas aditivas que por breves momentos hace olvidar la triste realidad en la que se vive. Frank McCourt nos plantea una novela cruda, desgarradora en la Irlanda acomplejada de la década de los ´30 y ´40, donde la indigencia era una deshonra aún a riesgo de morir por hambre. Solo el fino humor a través de la mirada inocente de los niños, y en especial del protagonista central, el joven Frank, hace llevadera la lectura, y atenúa la indignación, la impotencia y la tristeza que genera una sociedad en descomposición permanente. Quizás, o sin quizás, el espíritu desgarrador de la novela esté dado por un hombre que lleva al papel sus propias vivencias, la necesidad hereje del hambre, la carencia de afecto por parte de la sociedad (salvo contados casos, verdaderos faros en el mar de la deshumanización). McCourt en si es un faro, un faro para su familia, para sus amigos, que se retroalimenta de esperanza, inocencia y bondad. Solo él puede expresar tantos sentimientos, sencillamente porque los ha vivido, y sobrevivido para contarlos. Una novela que duele leerla, pero que termina por hacernos agradecer por lo que tenemos, y mirar con otros ojos a los que tienen menos que nosotros. La recomiendo de corazón.
Hace cerca de 20 años que me leí el libro y todavía recuerdo escenas que no se pueden olvidar. La dureza de una vida de miseria y de un padre que lo pone todo más difícil no te dejan indiferente. Una vida vista desde la mirada inocente que me recordaba la que mi madre me contaba durante la posguerra.
Un drama que narra el mismo protagonista en el que nos cuenta todo lo que vive durante su infancia en unos tiempos muy duros. Una gran obra.