Resumen y sinopsis de Ethan Frome de Edith Wharton
Un joven ingeniero retenido por su trabajo en una pequeña localidad de Massachussets observa a un hombre lisiado y envejecido que recoge en la oficina de correos una revista y un sobre con medicamentos. Es invierno y el ambiente del pueblo es claustrofóbico. El aspecto educado del hombre, la edad que no corresponde a su físico, los misteriosos silencios y prevenciones que despierta su presencia en los demás, su vida casi aislada en una destartalada granja con dos mujeres, llevan a preguntarse al ingeniero por qué sigue viviendo en un sitio de donde, como dicen los lugareños, «casi todos los listos se marchan». Pero el hombre tiene un motivo para no haberse marchado, o para haberlo intentado y nunca conseguido: una historia en la que se mezclan la fatalidad del destino y todas las sutilezas del amor prohibido.
Ethan Frome (1911) es una nouvelle cuyo escenario ?los pueblos y bosques de Nueva Inglaterra? es toda una tradición de la más distinguida literatura norteamericana (de Hawthorne a Lovecraft) pero una excepción en una novelista esencialmente moderna y urbana como Edith Wharton. Sin embargo, desde su publicación, no dejaría de ser una de sus obras más características, uno de los ejemplos más celebrados de su sensibilidad y de su estilo. Un auténtico clásico norteamericano y una auténtica lección de arte narrativo.
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No se entiende del todo sin los bosques y los gélidos inviernos de los pueblos de Nueva Inglaterra, sin la perpetua sensación de frío, oscuridad y apenas una tenue luz que la atraviesa; las difíciles condiciones de vida que enmarcan la triste historia de este Ethan Frome. Una historia oculta bajo la superficie helada de un hombre que arrastra una existencia miserable, que sobrevive hundido y derrotado, observado por ojos curiosos en sus monótonas tareas... en una aproximación progresiva del narrador, el visitante del pueblo que acabará por unir los fragmentos de su pasado, rompiendo su mutismo; un silencio adquiere una carga negativa para unos personajes que parecen condenados a convertirse en aquello que no querrían ser.
El drama es el de un amor imposible y lo integran tres individuos, unidos en una difícil relación por las circunstancias de la vida. Ethan es tímido, poco hábil socialmente, pero buena gente, lleno de inquietudes y deseoso de experiencias; sin embargo, está condenado a la frustración a causa de sus penurias materiales y de un matrimonio infeliz con una mujer enferma y amargada que lo imposibilita todo. Pero todo cambiará con la llegada a su hogar de la prima de esta, una muchacha inocente e inexperta, algo patosa, pero hacia quien siente una gran afinidad que no tardará en ser correspondida, pese a sus recelos y sus torpes avances iniciales, o el despertar de sus sentimientos dormidos… en un momento dado, le será imposible prescindir de algo que al menos concede alivio a tan insoportable panorama.
Firme la construcción de la trama, que avanza hacia un desenlace que intuimos trágico... y en efecto, existen cosas peores que la muerte, como quedar atrapado en una realidad infernal, que no se diferencia en exceso de la de unos muertos en vida. Trata también de la enfermedad, de sus efectos devastadores tanto en el enfermo como (incluso más aún) en quienes le rodean, su ejercicio del despotismo, de un poder blando, a través del silencio y el control, de la culpa, incluso del chantaje emocional; trata del cuidado del enfermo, que enferma a su vez al cuidador.
El auténtico tema, aún así, no es sino el de la falta de libertad; la de un sujeto a quien se lo arrebatan todo y aguanta estoicamente, pues le es imposible escapar de una jaula que, sin darse cuenta, ha levantado a su alrededor… para cuando queramos darnos cuenta, es demasiado tarde, algo se ha roto sin remedio, como un valioso recipiente de vidrio que el gato tira al suelo, como un trineo que sufre un accidente letal; elementos todos ellos que tienen su relevancia y su significado. Estamos condenados a una lucha diaria que no nos permite huir ni arreglar nada; más bien parece que nos hundimos incluso un poco más cada día en los problemas cotidianos, y contrasta la crueldad de la historia con la ternura, la ingenuidad, en la relación romántica de unos seres anónimos que sólo se tienen el uno al otro; por otro lado, están los sacrificios que uno lleva a cabo cuando no le queda otra, la vida adquiere contornos inesperados y ya no caben las excusas.
Es impresionante. Lo único que recomiendo es no leer el prólogo inicial de Soledad Puértolas y hacerlo, sí se quiere, una vez terminada la lectura.
Muy recomendable.
Novelita romántica con amores imposibles encorsetados en la moral de la época. Personajes indecisos que acaban infelices y de manera trágica. Su brevedad se agradece.
A pesar de su corta extensión (no más de 180 páginas), nos encontramos ante una novela francamente entrañable. Atmósferas y personajes perfectamente construidos, le dan un toque único a esta historia.
Desenlace inesperado pero más que satisfactorio.
¡Qué maravilla de novela! ¿Cómo se pueden condensar tantísimas cosas en tan pocas páginas? Edith Warthon nos presenta magistralmente un relato terrible y sobrecogedor en el que se mezclan una bellísima historia de amor imposible, unos paisajes gélidos y desolados, unos personajes desgraciados y que no pueden escapar a su destino, una sensación continua de agobio y desazón digna del mejor argumento de suspense... Y la tragedia, que se ve venir, que se masca en el ambiente. ¡Buf! En definitiva, una novela sublime.
Es una bonita y triste historia de amor, limpio y puro, entre dos seres muy elementales cuya bondad les impide rebelarse contra la tiranía de una esposa amargada y opresora, ni traicionar la confianza ajena, ni sus principios morales, para salvar la desesperada situación a la que se ven abocados. El prólogo y los preámbulos de la novela me han parecido excesivos.
A pesar de transcurrir en el frio invierno de Nueva Inglaterra , es una novela cálida que te atrapa como un abrazo. Breve historia de amor imposible que llega al lector.
Una novela corta con una magnífica ambientación, tanto de ese pueblecito ficticio de Nueva Inglaterra, como de sus duros inviernos y del interior del 'hogar' de Ethan Frome. Pocos personajes pero magníficamente construidos, sobre todo los tres principales en torno a los que gira la trama. Una historia muy bien contada acerca de cómo a veces todo se confabula para impedirnos vivir nuestra vida como quisiéramos. Una trama bien hilada con un punto álgido final espectacular que para nada se ve venir. Todo un clásico, en el que tal vez por tratar fundamentalmente de sentimientos, no se acusa para nada la distancia temporal. Una muestra de que no es necesario escribir extensas novelas para contar buenas historias. Una lectura muy recomendable.
Una pequeña joya de la literatura. Con un estilo narrativo muy envolvente. Por otra parte en ningún caso me parece literatura romántica, es una obra que habla sobre la culpa, los remordimientos y las ocasiones perdidas.
Una historia preciosa y bien contada. Desde el comienzo, la autora nos introduce en un pequeño pueblo americano, en pleno invierno, de hace un siglo. Acabas tomándole cariño a los personajes y no podrás evitar sorprenderte con el desenlace final.
Un novela corta pero muy rica en cuanto al estilo y al argumento.