Resumen y sinopsis de Washington Square de Henry James
A mediados del siglo XIX, cuando las nuevas clases emergentes ya empezaban a mudarse al norte de Manhattan, un rico y prestigioso médico neoyorquino se construye una casa en Washington Square. Es una «casa bonita, moderna», con terraza y porche de mármol. A ella se traslada a vivir en compañía de su hermana, una viuda romántica y sentimental, amiga de los secretos, y de su única hija Catherine, que a los veinticinco años no ha conseguido ser, según su padre, ni hermosa ni inteligente. A Catherine le corresponde, sin embargo, una herencia considerable, y cuando en su vida aparece un joven guapo y encantador, aunque sin oficio ni beneficio, el doctor no duda de que no puede sentirse atraído por ninguna cualidad de su hija que no sea el dinero.
Henry James trazó en Washington Square (1880) un soberbio retrato de interior alrededor de una mujer que se descubrirá en posesión de algo que, rodeada de tiranía y oscuridad, ni siquiera había intuido que tenía: voluntad.
Novela entretenida, pero muy predecible en su trama, acaba como tiene que acabar, para pasar el rato está bien.
Me gustó esta novela del realista del siglo XIX, el norteamericano H. James.
Los personajes están magníficamente descriptos y James utiliza un lenguaje muy americano, es decir, directo al grano y con bastante maniqueísmo.
El padre rico y poderoso de Catherine, su única hija, se da cuenta que el novio que tiene solo está interesado en la fortuna que heredará un día esta chica que ha sido poco agraciada por la naturaleza.
Catherine se obstinará en esta relación a pesar de todo lo que su padre podrá decirle.
El final es terrible y realista.
El libro contiene un rico descriptivo, lleno de detalles sobre el mundo refinado de un NY de 1880 que me recuerda el estilo exquisito de Edith Wharton.
Novela breve pero muy bien escrita, con una prosa sencilla e inteligente a la vez, en la que Henry James trazó un profundo retrato psicológico de los personajes principales, mostrando así de manera magistral su profundo conocimiento del alma humana. En mi opinión, uno de los grandes aciertos del libro es el tono de la voz narrativa, esa fina ironía con la que se definen caracteres y se describen situaciones en tan pocas palabras. Ha sido mi primer libro de este autor, pero sin duda no será el único.
Novela temprana de James, próxima todavía al realismo y carente del estilo denso de sus últimas narraciones. Lo más interesante está en los personajes, estudiados en profundidad, así como en la tensa confrontación que se da entre un padre y una hija. El padre, inteligente y orgulloso de ello, tiene un conocimiento profundo de las personas, pero su corazón se ha visto resentido por la viudedad, juzga mal a su hija (la considera tonta, mediocre, etc.) y se muestra inflexible y autoritario. La hija, acomplejada y a la sombra de un padre temido, empieza a tomar conciencia de sí misma y el conflicto que experimenta hace que cambie. Otros personajes importantes son la tía alcahueta, con pretensiones de hacer un melodrama de la realidad más trivial, y el típico cazafortunas, calculador y ambicioso, tal vez el más tópico en cuanto a definición. Hay predominio del diálogo, de réplicas afiladas y de un lenguaje más bien sofisticado, así como de un narrador omnisciente que a veces introduce sus propios comentarios. El Nueva York decimonónico, la sociedad acomodada estadounidense que mira a Europa con cierta admiración, son el marco en que transcurre esta historia familiar sin héroes ni villanos.
Está muy bien escrita, aunque al leerla me asaltaban continuamente las escenas de la película, una pena. Algunos conflictos que cuenta, ahora pueden resultar complicados de comprender, pero la personalidad de la protagonista, el padre y la tía Lavinia, tan marcadas y tan características, te hacen meterte en el conflicto y no permanecer indiferente.