Un libro por minuto
Internet ha supuesto un avance inmenso en el terreno educativo y, al mismo tiempo, cómo no, un retroceso. Y es que cuando uno se encuentra ante una asignación de lectura obligatoria, ya no hay que complicarse la vida: ya no es necesario buscar al estudioso de turno del que copiar, ni siquiera darse la ardua tarea de pasar los datos de una libreta a otra, ahora es tan fácil como buscar en la wikipedia, o en varios otras webs preparadas a tal efecto (no…
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Se diría que el libro intenta responder uno de los grandes interrogantes de todos los tiempos, al menos tal y como lo concibe un resabiado aunque honesto y paciente observador de su medio social como es James; por qué las chicas más guapas y más listas, que lo tienen todo para ser felices, acaban juntándose con los tipos más cretinos, malogrando su vida.
El campo de acción del escritor no es otro que el de la conducta, las decisiones y las relaciones humanas; la materia más común y a la vez más enigmática de la ficción. Los errores que se cometen y se pagan, las buenas intenciones que se saldan con el desastre. Las traiciones y las lealtades, los inevitables equívocos de la interpretación, siempre parcial y sesgada, que hacemos de nosotros mismos y de los demás.
Isabel Archer es una norteamericana abierta, por circunstancias de la vida, a la aventura europea; a conocer gente, tener experiencias, ver mundo. Para ello, no le falta de nada; inteligencia, belleza, sensibilidad, confianza en sí misma, cierta vanidad… y sobre todo, es ajena a prejuicios y costumbres rancias, propias de esa vieja Europa. Por lo tanto, resulta especialmente desolador que alguien como ella acabe tomando los caminos más tortuosos, y más aún cuando casarse sigue siendo la más importante jugada en la vida de una mujer, como en un cuento alejado de todo romanticismo cuya resolución es trágica, pero no a la manera desgarrada de las tragedias que culminan en muerte. Uno en que el príncipe azul es un triste pagafantas, las princesas no tienen siquiera la voluntad de emanciparse de la autoridad paterna y el medio principal hacia la libertad, el económico, puede ser más un impedimento que algo ventajoso.
El interés no siempre se mantiene a lo largo de un desarrollo sumamente pausado, más preocupado por los personajes, sus pensamientos, deducciones, diálogos cruzados a veces cual estocadas, siempre dentro de la mayor sutileza y sin pasarse un milímetro (únicamente hacia el final se desvelan ciertos giros culebronescos que, por otra parte, se podían adivinar con facilidad)… frente a una presencia física de lugares y objetos ligada a las impresiones. La acomodada sociedad de expatriados que se nos presenta se mueve a menudo entre distintas ciudades y capitales europeas, pero sus márgenes son estrechos, ocultando celosamente sus secretos, motivos y estrategias de manipulación.
Diletantes y pretendientes varios, una pareja de villanos de exquisitas maneras, secundarios cómicos (la pedorra amiga periodista), el amigo fiel y desinteresado (¿el propio James?), una aparente loca o idiota, pero conocedora de la verdad de las cosas... aportan cada uno su matiz, y cómo no, su punto de vista, a menudo inesperado y revelador, pues nadie es quien dice ser.
El narrador elegido es una figura de omnisciencia contenida, una primera persona que incluso interpela al lector, tratando de reconstruir para él lo sucedido. Son más las sombras que las luces en un ambiente de palacios ruinosos florentinos, ruinas romanas, iglesias, conventos, fríos salones, en el trazado de un recorrido que va de la inocencia juvenil a la amargura de un matrimonio fallido. La decisión final de Isabel, en apariencia incomprensible (¿coherencia con unos principios, con el camino elegido para bien o para mal? ¿Una relación de las hoy llamadas “tóxicas”?), demuestra el respeto del autor por sus razones, las deja a la imaginación.
Excelente novela llena de diálogos agudos e inteligentes, descripciones muy plásticas de lugares y situaciones. Los personajes están muy bien construidos, el narrador va perfilando a lo largo de la obra sus carácteres, sus rasgos psicológicos más íntimos. Destaca la protagonista principal, Isabel Archer, una joven americana vital, amante de su independencia personal, que rechaza a un pretendiente americano que le proporcionaría seguridad económica y social, y viaja a Inglaterra tras el fallecimiento de su padre, invitada por su tía que pretende ayudarla y servirla de guía en su descubrimiento de Europa. Allí tomará decisiones erróneas que la alejarán de su propósito.
Hay en toda la narración algunas elipsis intencionadas que posteriormente el autor va desvelando a modo de un dibujante que vuelve sobre sus pasos para perfilar un retrato.
No me es posible leer esta obra en el inglés original. Debo confiar en la labor del traductor para sumergirme en el mundo de Henry James. Empecé a leerla en una edición del grupo Planeta (Ediciones del bronce), de 2001, traducida por BLB. Una edición plagada de errores lingüísticos (el más frecuente un queísmo: "le preguntó si era sobre ella que quería hablarle"), algunos modos coloquiales impropios ("cerca suyo", "¡para nada!"), párrafos incomprensibles... Opté por buscar otra edición mejor traducida. Felizmente encontré una de Penguin Clásicos, magníficamente traducida por Ana Eiroa. Qué importantes son los traductores y qué poco se les pondera.
Una novela introspectiva: el magnífico personaje de la dama siempre está reflexionando sobre sí misma, pensando sobre lo que debe hacer ante cada situación. Alta calidad literaria que se ve empañada en la edición de bolsillo que he manejado por una traducción, a mi juicio, confusa y por numerosas erratas.
Novela de ritmo pausado donde destaca sobre todo por la caracterización de los personajes analizados, diseccionados físicamente pero sobre todo psicológicamente. Me han gustado los diálogos de la novela destacando el doble sentido de muchas de sus frases, la lucha dialéctica entre los contertulios...
La novela también tiene carencias que he echado en falta pues un poco de acción no le vendría mal y algo más de realidad social de la época, pues aquí solo aparece reflejado la alta burguesía y la aristocracia. De todas maneras excelente novela de época.
Es la primera obra que leo de Henry James y no ha sido fácil. Según dicen, todo esfuerzo merece recompensa y en este caso, así ha sido.
Confieso que he tardado como tres meses en leerlo. Lo he alternado con otros libros pero siempre he vuelto a él. Es lento y muy descriptivo ( a veces en exceso) pero la manera de escribir de este autor es muy rica y brillante. Para mí, lo mejor, son los diálogos de los personajes. Son mordaces y sarcásticos, pero eso sí, siempre corteses.
Los personajes más interesantes y psicológicamente más atractivos son los femeninos. El personaje central, Isabel Archer (en torno a quien todo y todos giran) al principio enamora, más tarde decepciona y finalmente esperanza.
El final, podríamos llamarlo abierto. El autor lo deja en manos del lector. Yo, por mi parte, creo que deja entrever que es lo que a él le gustaría que dedujese.
Si a alguien le interesa y, mi opinión le sirve de algo,le diría que adelante,sin duda. Es un libro ideal para disfrutarlo poco a poco.
La verdad es que varias veces estuve con el libro en la mano dudando si comprarlo o no. Ahora que me aventuré a leerle,continuaré haciéndolo.