Resumen y sinopsis de Benito Cereno; Bill Budd, marinero de Herman Melville
La obra de Herman Melville (1819-1891) –una de las más complejas, originales y profundas de la literatura moderna– ha conocido uno de los destinos más extraños que concebirse pueda; apenas valorada en el momento de su publicación, olvidada prácticamente después de su muerte, su redescubrimiento a lo largo de la década de 1930 la situó definitivamente en un lugar de honor dentro de la narrativa moderna. El presente volumen contiene dos novelas breves escritas en distintas fechas y con diferentes propósitos y estilo, pero a las que une la nota común de su ambientación marinera. Benito Cereno (1854) es una historia basada en hechos reales, documentalmente probados ante los tribunales en un juicio que se hizo célebre. Es una de las narraciones más explícitas y sencillas del autor, pero en él los característicos elementos del relato marinero clásico se desarrollan de tal manera que por momentos linda con el de terror. Billy Budd, marinero es una novela póstuma, escrita en 1889 y publicada 1924, que narra la historia de un muchacho ingenuo y lleno de buenos propósitos que se enfrenta con el clima opresivo y agobiante de una tripulación hostil, alegoría tal vez del carácter cerrado, enigmático e inhumano que el mundo tuvo para Melville. Otras obras de Melville en Alianza Editorial: «Bartleby el escribiente» (L5603), «Moby Dick».
Ha participado en esta ficha: Leo_africanus
Me refiero solamente a "Billy Budd, marinero": Budd, joven marino mercante, es forzosamente alistado en la armada inglesa pocos meses después de los motines del Spithead y del Nore, hijos de las ideas revolucionarias que en esos días siembran el caos al otro lado del canal de la Mancha. A pesar de ser un gaviero diligente y querido por la marinería, Billy no tardará en verse envuelto en graves problemas que escapan a su voluntad y entendimiento. Bajo la tutela de Melville, somos testigos de la intricada coordinación que el funcionamiento de un buque de guerra requiere y de los equilibrios que un capitán debe hacer para que el delicado ecosistema de a bordo no se convierta en un avispero. Es una buena historia, bastante breve, que Melville enriquece con su prosa solemne y eficaz, a veces casi bíblica y a menudo salpicada de reflexiones morales, brindándonos, como siempre, una placentera singladura literaria.