Resumen y sinopsis de Tenemos que hablar de Kevin de Lionel Shriver
Eva es autora y editora de guías de viaje para gente tan urbana y feliz como ella. Casada desde hace años con Franklin, un fotógrafo de publicidad, decide, con muchas dudas, cerca de los cuarenta años, tener un hijo. Y el producto de tan indecisa decisión será Kevin. Pero casi desde el comienzo, nada se parece a los mitos familiares de la clase media urbana y feliz. Eva siente que Franklin se ha apoderado de su maternidad, convirtiéndola en el mero contenedor del hijo por nacer. Y Kevin es el típico bebé difícil, que tortura con sus llantos, que no quiere comer. Se convertirá en el terror de las niñeras, en un adolescente terrible, en el antihéroe a quien sólo le interesa la belleza de la maldad. Al llegar la sangrienta, mortífera epifanía de Kevin, dos días antes de cumplir los dieciséis años, el niño es un enigma para su madre.
Ha participado en esta ficha: bclaudia
Llegué hasta la página 33 y ya no pude más, qué narración más densa, qué frases más pedantes y enrevesadas, no creo que sea culpa de la traducción porque busqué la novela en inglés y es igual de incomprensible.
A modo de ejemplo pongo esta frase: ”Tú considerabas que las personas se redimían por un acto de voluntad. Menospreciabas a las que, como yo, se abandonaban a sus puñeteras insatisfacciones inconcretas, porque su incapacidad para aceptar que el mero hecho de estar vivo ya resultaba maravilloso era la prueba de su carácter débil “. ¿Este concepto que intenta describir no se puede escribir de forma más sencilla? Seguro que sí.
Desde la primera página hasta la página 33, me la he pasado releyendo lo que ya había leído, a ver si captaba lo que significada alguna frase concreta, y cuando la narración no es ágil y tienes que volver a releer, la dejo y paso a otra novela, no puedo perder el tiempo, que tengo mucho más que leer…
Tal vez en otra época de mi vida me resultara interesante, pero ahora no aguanto rollos, solamente pido que me cuenten una historia con una narración ágil con la que pueda conectar…
Me pareció muy interesante, te da una idea de cómo pueden ser esas personas que cometen esas atrocidades, y que algunos tal vez ya nacen con esas inclinaciones, definitivamente está escrito de una manera que te va atrapando y casa vez se hace más entretenido.
Me gusta cómo me lo cuenta y lo que me cuenta.
Muy buena, la recomiendo para todo el que le guste la buena literatura. Un magnífico retrato psicológico sobre la maternidad y la culpa. Y una profunda crítica a la sociedad norteamericana. Es lenta de leer, debido a la necesidad de pararte a asimilar todo lo que la autora quiere transmitir.
Me ha parecido aburridísimo... no me gusta dejar libros sin leer, pero tras darle varias oportunidades y viendo las buenas críticas no quería dejarlo... pero ha sido imposible.
La narración se hace pesada, cuenta muchas situaciones que no trascienden nada a la historia, el estilo de la autora es muy intimista, cargante a veces.
Coincido con muchos. Algo lento al principio pero poco a poco va cogiendo ritmo y tengo que reconocer que el 30% final del libro, me lo leí de una tirada. Es una historia desgarradora.. No recomiendo leer si estas esperando un hijo ;)
Por cierto, me encantó la última frase del libro.
Brutal. Sin querer hacerme el gracioso, el niño empieza en plan super nanny y acaba como hermano mayor pero a lo bestia. Poco a poco ves que se acerca la tragedia. La narración es fabulosa y en más de una ocasión el corazón en un puño. Muy dura, pero muy, muy buena
Enorme novela.
Está narrada de forma epistolar. Cartas meditabundas que intentan servir de purga, alivio y consuelo, para una situación terrible y desbordante que se sale de toda comprensión lógica, humana y sentimental.
Eva es una empresaria de éxito. Una mujer contemporánea hecha así misma que se plantea una tardía y no bien pensada maternidad.
Cuando Kevin nace nada es como tendría que ser. La decepción es absoluta.
El rechazo entre madre e hijo es mutuo. Una relación de aborrecimiento y odio, que pronto se hace bien patente en el rescoldo del hogar.
Crítica notable a la clase media-alta, y al prestigioso sistema educativo norteamericano que malcría y consiente a los hijos y a los alumnos más de lo debidamente permitido.
Eva intentará buscar las causas que la llevan a pensar que a veces ha sido una mala madre; y otras, a creer que su hijo ya había nacido con esa clara tendencia a la maldad.
Un burdo estigma que deriva en el egocentrismo y en la perversidad; y que le han llevado a cometer una horrible y tremebunda masacre.
El libro es un retrato crudo, rudo y cruento.
Un martillo pilón y acerado que te golpea fuerte y donde más duele; abriendo heridas que te traspasan y que te perforan todos los poros de la piel.
Soberbia literatura que se puede definir con una gran palabra: IMPACTO
Un libro fascinante. Aunque al principio resulta un poco lento, cuando nace Kevin no puedes dejar de leer y de entender a la madre aunque al padre yo le daría de tortas. Impresionante narración hasta el final.
Un libro valiente que ahonda en la antítesis de la mitificada maternidad. Me hubiera gustado no obstante que se hubiera tratado este tema sin tener que recurrir al hijo que termina perpetrando un acto abominable, pero tan sólo porque así si hubiera sido una propuesta realmente valiente. De todas formas esta premisa dota a la novela de una dimensión mucho más atroz. Una demoledora reflexión sobre la culpabilidad y responsabilidad de los padres, sobre las diferentes posturas adoptadas por ambos progenitores para educar a los hijos, sobre cómo afecta a una pareja la paternidad. Una feroz crítica a la sociedad estadounidense y su clase alta, y por extensión a toda la sociedad occidental. Muchas preguntas para las que desgraciadamente no hay respuestas. El final, aunque no pilla de sorpresa, es impactante y demoledor. Y ante todo es el testimonio de una mujer, Eva, la madre, que se abre en canal con una generosidad terrorífica, dramática y apabullante.