Resumen y sinopsis de La vida interior de Martin Frost de Paul Auster
Martin Frost se ha pasado los últimos tres años escribiendo una novela y necesita un descanso. No tiene planes, sólo aspira a unas semanas en el campo, a no hacer nada, a vivir como vive una piedra. Y se instala en casa de sus amigos Jack y Anne Restau, que se han ido de viaje y le han ofrecido su casa, lejos del mundanal y neoyorquino ruido. Pero unas pocas horas de silencio y de aire puro bastan, y de repente una idea empieza a darle vueltas en la cabeza. Así comienzan siempre los cuentos: un minuto antes no hay nada, y al minuto siguiente, súbitamente, allí están, agazapados, esperando para salir a la luz, para trepar a la página, para empezar a vivir una vida que no es de piedra. Martin empieza a escribir, una línea apenas. No será un relato muy largo, veinticinco o treinta páginas, cuarenta a lo sumo, y se quedará en casa de sus amigos hasta que lo termine. Se va a dormir, y despierta al día siguiente con una chica medio desnuda en su cama que parece haber salido de la nada. Dice que se llama Claire, que es la sobrina de Anne Restau, tiene una llave de la casa, está allí para quedarse, pide disculpas por su súbita aparición, y finalmente es aceptada por Martin de mala gana. Pero el relato que está escribiendo, y el deseo por Claire, crecen al mismo tiempo, se expanden, ocupan un lugar en la realidad, cobran vida. Y cuando la escritura del cuento llega a su fin, la misteriosa y carnal Claire -Martin ha descubierto que los Restau no tienen sobrinas-, comienza a enfermar...
La vida interior de Martin Frost tiene una complicada historia. Al principio fue el guión de una película de treinta minutos que un productor alemán le pidió a Paul Auster para los Cuentos eróticos, una serie de doce episodios. El proyecto se encalló, Auster lo dejó de lado y comenzó a escribir El libro de las ilusiones. Pero como en la literatura -y en el cine- nada muere y todo se transforma, la historia de Martin Frost y Claire devino entonces una de las últimas películas de Hector Mann, el crepuscular cómico y director de cine protagonista de aquella novela «caleidoscópica como una sesión de magia». Y ahora, el último y quizá definitivo avatar de La vida interior de Martin Frost, la historia de un hombre que escribe un cuento sobre un hombre que escribe un cuento -y unas cuantas cosas más-, es este guión de la película del mismo nombre que Paul Auster ha escrito y dirigido, una fulgurante celebración de los goces del amor, del arte, de la invención, de la subterránea trama que nos envuelve a todos en el infinito laberinto de la vida y la literatura.
Ha participado en esta ficha: yiyolon