Resumen y sinopsis de Doctor Faustus de Thomas Mann
En Doctor Faustus Thomas Mann -galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 1929- retoma la leyenda de Fausto, la traslada a la época contemporánea y la dota de nuevo contenido. La novela adopta la forma de una biografía, y en ella Mann aborda la “la catastrófica regresión de un espíritu hiperdesarrollado a un arcaísmo primitivo” planteando a la vez como un fenómeno individual, el del protagonista, Adrian Leverkühn, y como uno de los problemas más duros que debió afrontar la Alemania del siglo XX, Doctor Faustus alcanza un perfección formal y una profundidad espiritual que raramente se encuentran en la narrativa europea contemporánea.
Ha participado en esta ficha: bclaudia
Recuperación del mito de Fausto para hablar del hundimiento material y moral alemán tras 1945, en su ceguera y carrera hacia la locura. El autor realiza una autocrítica hacia su propio país cargada de culpa y amargura, extrayendo conclusiones poco tranquilizadoras en un momento histórico crítico. Los crímenes de Alemania no serían algo casual, sino intrínseco de su ser nacional, ligado a la conquista y el afán de dominio, una vez perdida la inocencia tras la gran guerra, hasta llegar al desmoronamiento total y sin futuro tras la segunda. Sin embargo, la diferencia entre el narrador de la historia (el humanista clásico e idealista ingenuo que es Serenus Zeitblom) y su protagonista (Adrian Leverkuhn, genio musical enfermizo y atormentado, inspirado quizá por el mismo demonio), objeto de la admiración y los desvelos del primero, no deja de reflejar la propia personalidad dividida y en conflicto del propio Mann. Artista insobornable, predestinado a un trágico desenlace, Leverkuhn encarna los sueños, las aspiraciones, el desengaño último del alma alemana, apartado de lo humano, con su mirada fría hacia la vida y su risa irónica, todo sea con tal de alcanzar los secretos más sublimes de la ciencia musical. Mediante la descripción indirecta de Zeitblom, se contagia al lector una fascinación hacia su figura similar a la que éste siente, sin llegar nunca a desentrañar todos sus secretos.
La vida pública del respetable y humilde hombre de letras frente a la eremítica del genio que sólo se debe a sí mismo, la creencia en lo humano frente al cálculo frío y riguroso del arte… son estas luces y sombras las que da forma a un relato en aparente construcción, interrumpido por los comentarios de un autor que pide comprensión y rompe hasta cierto punto las reglas del arte novelesco. Es muy amplio (demasiado, puede fácilmente pensarse) el despliegue de erudición y literatura, de un estilo denso y abundante en extensas digresiones sobre teoría musical (especialmente, al analizarse con sumo rigor la obra de un compositor inexistente como es Leverkuhn… casi un pequeño ensayo dentro de la novela) y sobre materias tan diversas como la teología, que no facilitan al lector su tarea… ralentizando el desarrollo, pero ofreciendo perspectivas que ayudan a entender a nuestro antihéroe. Como fondo a las dos figuras principales, circulan por las páginas una serie de personajes propios de un tiempo convulso y en plena transformación (la forma en que éstos son presentados -minuciosas descripciones que presentan retratos físicos y de carácter- tiene un sabor muy decimonónico)... abriéndose paso temas como el adulterio, la homosexualidad, la sociedad elegante y sus apariencias… parte todo ello de un cambio en las mentalidades, de un mundo que no volvería a ser el mismo.
Se trata de la biografía del compositor Adrián Leverkhün contada por su amigo de infancia Serenus. Es tal la admiración que siente por la inteligencia, brillantez y forma de ser de Adrian que por momentos parece que se trata de una historia de amor más que de una amistad. El libro es realmente tedioso y espeso en sus introducción, muy introspectivo y con un lenguaje muy pedante y pretencioso. Hasta la mitad de la obra no sucede nada más interesante que la vida del compositor contada con una exagerada admiración. En la mitad del libro sucede lo más interesante y esperado: un encuentro con el diablo. En el desenlace se descubre que dicho encuentro conllevó un pacto para aumentar la creatividad del músico a cambio de recluirse y no tener contacto humano.
Creo que Thomas Mann, como clásico de la literatura, es un escritor muy correcto, de ejecución impecable, y un uso de las palabras inigualable, pero también creo que se centra demasiado en la vida burguesa alemana, en el sentimiento nacional debido a las épocas convulsas en que transcurre la obra y su redacción. Él mismo se disculpa de la amplitud de sus capítulos y de su lenguaje enredado. A veces tenía la impresión de que escribía esos circunloquios infumables para reafirmarse en su erudición. En resumen, libro complejo y árido de leer sobre todo sin un mínimo de conocimientos musicales.